La unidad policial del aeropuerto de Castelló ha sido suprimida medio año después de presentarse por la falta de actividad en la base. Las funciones que tenía asignadas en el puesto fronterizo las desempeñarán agentes de Extranjería de la Comisaría Provincial, que se desplazarán hasta el aeropuerto cada vez que aterrice un avión.
El aeropuerto de Castelló recibió el pasado 22 de enero a los siete agentes destinados en atribución temporal de funciones para dar respuesta a las competencias específicas de la Policía en la instalación. La Unión Federal de Policía de la Comunitat Valenciana (UFP) denunció ayer la disolución del efectivo del aeropuerto, justo cuando se atisban los primeros vuelos regulares, programados a mediados de septiembre. Según la UFP, esta decisión vulnera el Reglamento Europeo y del Cuerpo Nacional de Policía, ya que desde que se habilitó al aeropuerto de Castelló como puesto fronterizo y se declaró frontera exterior Schengen, quedó sujeto al Reglamento 562/2006 del Parlamento Europeo y del Consejo por el que se establece un código comunitario de normas para el cruce de personas por las fronteras Schengen.
Fuentes policiales explicaron que la decisión ha venido motivada por la falta de actividad en la base, que hace innecesaria la presencia permanente de siete policías. Serán agentes adscritos a la Brigada de Extranjería de la Comisaría Provincial los que den servicio al aeropuerto cuando se les requiera. La UFP denuncia que los agentes tendrán que desplazarse 80 kilómetros, «causando la merma y sobrecarga del personal».
