El Rototom Sunsplash es el festival de música «reggae» más importante de toda Europa y se celebra en Benicàssim desde 2010, dirigido por el italiano Filippo Giunta. Su filosofía es abrir este mundo a todo aquel que quiera participar y, a la vez, crear un lugar donde compartir ideas y diferentes culturas. Este año se celebrará del 15 al 22 de agosto, con un aumento de las ventas del 10 % respecto a 2014, con más de un 50 % de público extranjero. Sin embargo, su estancia en Benicàssim peligra debido a las diferencias entre la dirección del festival y las autoridades del municipio. El ayuntamiento les exige cambiar la fecha a la primera quincena de septiembre, para mantener la economía del pueblo activa, algo que su director considera «inviable».
¿Por qué no pueden cambiar la fecha del festival a principios de septiembre?
Por una parte, nuestro público es internacional y tenemos que adaptarnos a sus vacaciones. En septiembre, perderíamos la comunidad anglosajona, ya que para asistir a nuestro festival se necesitan al menos 10 días de vacaciones. Además, los actos van orientados hacia toda la familia y los pequeños ya habrían comenzado el año escolar. Con las fechas actuales, ya no contamos con participantes de países nórdicos al realizarlo el 15 de agosto, porque su periodo vacacional es en julio. Por otra parte, faltarían todos los grupos jamaicanos, que al fin y al cabo son el espíritu del festival. Los artistas prefieren ir a eventos norteamericanos durante la fecha que nos han propuesto, y estaría fuera de nuestro presupuesto contratarlos para que vengan a realizar tan solo un concierto.
¿Qué posibles soluciones han puesto sobre la mesa?
Nosotros estamos abiertos al diálogo, y es algo que hemos hecho llegar a las autoridades. De esta forma, hemos propuesto cambiar la fecha a primeros de julio, haciendo que el FIB se trasladase a finales. Así podríamos mantener un buen programa musical y cultural, y a la vez favorecer al pueblo de Benicàssim.
¿Qué pasaría si no llegan a un acuerdo?
Llevamos cuatro años con el mismo problema, y al final sentimos que las autoridades no nos quieren aquí. Nosotros no buscamos imponer nuestro festival a nadie, simplemente lo ofrecemos a aquel que quiera aprovecharlo. Sería una locura para Benicàssim perder el festival. Nuestra intención es quedarnos en el municipio porque llevamos años aquí y nos encanta, pero también sabemos que otros muchos pueblos nos acogerían enseguida. El problema es que la visión de las autoridades no la comparte el pueblo y pensamos que el ayuntamiento no representa la opinión de los vecinos. A mí me paran por la calle y me felicitan por el Rototom. Me piden que no nos vayamos porque aportamos mucho a Benicàssim, y eso hace que quiera seguir en este municipio.
Una de las actividades más importantes del festival es el Foro Social, que este año vuelve a incluir a Monedero, alguien que ha sido una figura clave en la «revolución» de Podemos. ¿Es el Rototom el centro de la nueva política?
El festival es un encuentro de gente que quiere un mundo mejor y busca un entorno multicultural. Nosotros no nos mezclamos con partidos políticos, por lo que Juan Carlos Monedero asistirá en calidad de intelectual para exponer su visión sobre el conflicto de Ucrania, algo que consideramos un punto clave, ya que la guerra no es un método para llegar a la paz. Ya ha participado otros años, no cambia nada por haber sido miembro de Podemos.Por esta razón, todo aquel que asista al Foro Social no hará nunca propaganda política, sino que tratará problemas de la actualidad y aportará su granito de arena para solucionar el malestar que vivimos, además de favorecer el diálogo.
Este año se incluyen grupos musicales que no son artistas de espíritu «reggae», como Major Lazer o Chambao. ¿Se busca un cambio de estilo?
El Rototom es un festival «reggae» en el corazón desde su fundación, pero creemos que también es bueno abrirse a otro tipo de géneros musicales. Buscamos que los fanáticos de la música jamaicana experimenten otros estilos y abran su mente. También queremos experimentar, por ejemplo, con el «Tributo a Marley», en el que se versionarán sus mejores canciones. El caso de Major Lazer nos hace especial emoción porque, aunque han colaborado con los mejores artistas «reggae», es algo nuevo para ellos y están muy ilusionados.
