La Dirección General de Aguas de la Generalitat Valenciana se ha comprometido a iniciar «de manera inmediata» el procedimiento para normalizar el importe de la tasa por vertidos al mar de agua sin depurar que está pagando el Ayuntamiento de Benicarló. Actualmente el ayuntamiento ha tenido que hacer frente al pago de 500.000 euros, correspondientes a los años 2013 y 2014. Si la depuradora hubiera estado en funcionamiento, el importe correspondiente a estos dos años se reduciría a 20.000 euros. Así se estableció en la reunión mantenida este miércoles entre la alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, el concejal de Medio Ambiente, Ximo Bueno, y el director general de Aguas, Manuel Aldeguer. En la reunión participaron también técnicos de la Conselleria de Medio Ambiente y del ayuntamiento.
La alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, aseguró que esta reunión supone el punto de partida «de una línea de trabajo conjunta entre las dos administraciones que tiene como objetivo garantizar que los ciudadanos de Benicarló no tengan que asumir el coste de una tasa claramente desproporcionada».
El equipo de gobierno detectó, en el mes de junio, que la tasa por vertido de aguas correspondiente al año 2013 por un importe de 151.213 euros, no estaba consignada en el presupuesto municipal. Los cálculos efectuados por los técnicos del departamento de Medio Ambiente del ayuntamiento, concluyeron que la tasa correspondiente a 2014 y que la dirección general de aguas aún no ha hecho llegar al ayuntamiento, ascenderá a otros 359.000 euros. En total, más de medio millón de euros que, según el concejal de Medio Ambiente, Ximo Bueno, «es una cantidad muy preocupante que condiciona la capacidad de maniobra de los presupuestos del ayuntamiento».
Se da la circunstancia de que la propia administración responsable del retraso de la puesta en marcha de la depuradora de Benicarló es la misma que aplica la tasa por vertido de aguas no depuradas. De hecho, si la depuradora hubiera estado en funcionamiento, la tasa correspondiente a las dos anualidades se hubiera reducido a un importe de 20.000 euros en total.
La alcaldesa de Benicarló tildó está situación de «claramente injusta, ya que la construcción de la depuradora depende precisamente de la Conselleria que recauda la tasa». Miralles, subrayó también que la tasa es «de aplicación legal, pero en el caso de Benicarló conlleva una clara penalización».
Pagando y sin EDAR
Benicarló es uno de los últimos municipios de la Comunidad Valenciana en tener en funcionamiento su depuradora de aguas residuales. El concejal de Medio Ambiente, Ximo Bueno, lamentó que «es un situación muy triste, y más cuando Benicarló abona religiosamente el canon de saneamiento de aguas desde los años 90», dijo. Actualmente la depuradora de Benicarló está trabajando en periodo de pruebas. Tan pronto como se midan y certifiquen los diferentes parámetros de calidad de las aguas, la infraestructura entrará en pleno funcionamiento. Según las previsiones del ayuntamiento, la EDAR funcionará con toda normalidad a finales de mes.
