Superando con nota regular el debut en Liga con un empate en el Benito Villamarín, el Villarreal se somete a su primer gran examen este viernes, a las 20.30 horas en el estreno liguero en El Madrigal. Además, no lo hace ante un rival cualquiera, sino ante un Espanyol que el año pasado fue el equipo que con un doloroso 0-3 sacó los colores a un submarino que se había mantenido casi inexpugnable como local.
Notable fue la temporada en casa realizada por el conjunto de Marcelino García Local, con solo seis derrotas y un empate en los 19 encuentros disputados, consiguiendo 37 puntos de los 60 que al final le permitieron acabar sexto y clasificarse para jugar de nuevo la Liga Europa.
Esas seis derrotas fueron precisamente ante los cinco que le superaron en la tabla, Real Madrid, FC Barcelona, Atlético, Valencia y Sevilla y solo el conjunto perico se unió de forma inesperada a esta lista de verdugos, de ahí las ganas que le tiene la afición.
Unos números difíciles de superar ya que se rozaron todos los récords, como el de ocho victorias consecutivas en casa, conseguidas desde el 2 de noviembre que se perdió 1-3 ante el Valencia hasta el 0-2 del 22 de marzo ante el Sevilla.
Fueron casi cinco meses en los que equipo y grada se apoyaron mutuamente y esta temporada, con la mayor respuesta de la afición en una campaña de abonos que premia la asistencia al campo, se prevé una mayor presencia en las gradas aunque horarios como el del viernes o el del pasado domingo , a las 22.30 horas,no ayuden en exceso.
El ya veterano y muy querido jugador como es Mario Gaspar sabe que es lo que necesita la grada para motivarles y apoyarles en esta nueva andadura. «Tenemos ganas de jugar en El Madrigal con el apoyo de nuestra gente y brindarles una victoria para que se vayan enganchando y contagiando de la ilusión que tenemos nosotros», señalaba.
El lateral es consciente que ante el Betis el equipo tuvo muchos problemas, «no fue un encuentro demasiado brillante, pero sí que estuvo muy disputado» y aunque considera el empate injusto porque el gol rival fue en fuera de juego, «haciendo valoración del punto, es positivo y lo tenemos que redondear ganando el viernes en casa».
Un triunfo que se antoja complicado ante un rival al que se le tiene muchas ganas. «Contra el Espanyol no va a ser nada fácil, pero hay que dar una buena imagen, ganar por nuestros aficionados y sumar la primera victoria de la temporada», concluye el lateral Mario Gaspar.
