En lugar de los tres puestos de comida que estaban previstos para el recinto de la marcha durante estas próximas fiestas patronales de Vila-real en honor a la Virgen de Gracia, finalmente, habrá solo dos paradas ya que a mediados de la semana pasada uno de los concesionarios de la plica renunció a ella por motivos personales.

«En mayo funcionó perfectamente y no hubo ningún problema», señaló ayer el alcalde en funciones de la ciudad, Pasqual Batalla, quien explicó que la vacante no será sustituida ya que un informe de los técnicos del departamento de Desarrollo Local advierte de que los trámites administrativos que deben seguirse ahora tendrán un plazo de tiempo «no inferior a los quince días anteriores al montaje de la instalación». El procedimiento ahora pasa por presentar el expediente de resolución ante la junta de gobierno del próximo lunes. De todos modos, Batalla también matizó que otro de los informes señala que el consistorio «no tiene la obligación de sacar la concesión». «Nosotros sí que queríamos pero no ha sido posible», lamentó Batalla. Asimismo, el edil dijo que los dos restauradores restantes que sí que montarán sus negocios en el recinto festivo, «son sabedores de la situación y están conformes en asumir los gastos de manera compartida».

Menos conflictividad

Pese a esta última baja y a que la plica anual que se sacó para las pasadas fiestas de septiembre tuvo un lugar sin cubrir, los datos de participación aumentan, según indicó ayer el edil.

Más participación y menos conflictividad es lo que se deriva de los datos que maneja la Policía Local, «gracias al recinto de la marcha y a que se trata de un espacio en el que es mucho más fácil controlar la seguridad». También bajan las denuncias a peñas por incumplimiento del horario que establece la ordenanza de convivencia ciudadana. «Las peñas saben que pueden continuar la fiesta en el recinto de la marcha», señaló Batalla.

En cuanto a la afluencia de gente, durante toda la semana de las pasadas fiestas de Sant Pasqual, pasaron por el recinto entre 26.000 y 28.000 personas. Además de la vertiente de ocio nocturno, el recinto también albergará actividades de índole familiar de cara al mediodía y en las que se mostrarán los productos típicos de las fiestas como el 'porrat' o el vino.

Asimismo, durante las próximas fiestas, el municipio va a mantener el servicio gratuito del «bus de la marxa» que parará enfrente del recinto. Entre semana lo hará hasta las 3.00 horas de la madrigada y los fines de semana prolongará el horario hasta las siete de la mañana.

Para las fiestas en honor a la Virgen de Gracia, los vecinos y visitantes de Vila-real va a poder disfrutar de más de doscientos actos preparados a lo largo de la semana. De todos ellos, un total de 91 han sido organizados por la Comissió de Penyes y las peñas en general, por lo que la participación ha sido muy elevada.