Tras un viernes marcado por las precipitaciones, Benicàssim contó ayer con un clima muy agradable para poder disfrutar, por fin, de una jornada completa de la Belle Époque. Los vecinos y visitantes se acercaron ayer al Paseo Coloma para disfrutar de unas 40 actividades durante todo el día. La jornada comenzó con la presencia de los concursantes del fotomaratón, que dedicaron gran parte del día a inmortalizar con sus cámaras los mejores momentos de la recreación de los años 20 en la zona de las emblemáticas villas del municipio.

Además de ellos, muchos de los asistentes al evento iban con cámara o móvil en mano captando cada una de las escenificaciones que ambientaron el paseo benicense. Junto con las animaciones teatrales como «Doña Amparo y Rosita» o «Llegada a las villas», que interpretan escenas costumbristas de la época, el público disfrutó del desfile de bicicletas y coches antiguos que recorrieron el municipio desde la calle Santo Tomás hasta el paseo.

La tarde de ayer también contó con la presencia de miembros de la agrupación Folklórica El Cremaller, que escenificaron una llegada de pasajeros, un desfile de la Unión Musical Santa Cecilia de Benicàssim, la actuación musical de Gumbo, cuentacuentos, así como diferentes talleres infantiles de alfarería o macramé o un taller exhibición de rejillas para sillas o montaje de vidrieras.

Llegada la noche, la actividad se concentró en el escenario situado enfrente de Villa María, donde se llevó a cabo la representación del musical Chicago, a cargo de los integrantes del grupo El Taronger, junto con la Orquesta Lírica de Castelló.

Hoy la programación contempla actividad desde las 11.00 horas con el inicio del concurso de dibujo infantil, bailes o un espectáculo de magia a las 18.00 horas en el escenario Villa Elisa.