El Castellón B de Fernando Campos arrancó un buen punto del campo del Atlético Museros. Un trallazo del ondense Carlos López sirvió para que el trabajo, bastante mejorable, de los muchachos albinegros, encontrara recompensa ante un rival muy correoso y pegajoso, que contó en sus filas con siete futbolistas asiáticos. Los valencianos se adelantaron en el marcador nada más arrancar el encuentro por mediación de Chicha Chen. A base de trabajo y sacrificio se logró arrancar un punto gracias a un trallazo del gran Carlos López, que cogió un rechace en la frontal del área y envió el cuero al fondo de las mallas defendidas por Chu Yeichi.

La curiosidad del encuentro del filial albiengro es que el Atlético Museros ha recogido el testigo del Cracks de Primera Regional para acoger a una amplia representación del filial del Shanghai Shenhua chino. De este modo, hasta 16 jugadores forman parte de una plantilla que, al revés que pasaba con el proyecto predecesor, también cuenta con jugadores españoles y con algunos incluso de Museros, como el capitán, Álvaro.

Su entrenador, el valenciano Rubén Rodríguez, que ya era el técnico con el Cracks y que «por política de club» es el único que concede entrevistas, de momento, explicaba ayer que han decidido apostar por Museros para «jugar en una categoría mayor que se adapta más a nuestros objetivos».

Estos pasan, en gran parte, por preparar a jugadores para que pasen a formar parte del primer equipo del Shanghai, que disputa la Superdivisión china. De hecho, siete de los llegaron la campaña pasada están jugando ahora en este equipo en el que también está el ex futbolista del Levante UD y del Valencia CF Momo «Sissoko». Por cierto, Rodríguez estaba en el banquillo dirigiendo a los suyos, pero en la grada veía el partido, con mucha atención, el entrenador que el Shanghai ha traído de su país.

Por su parte, la afición de Museros, que ayer ya fue a respaldar a su equipo, se mantiene todavía «a la expectativa». En el pueblo se habla, y mucho, de este innovador proyecto pero, de momento, la mayoría prefieren ser cautos y esperar a ver cómo evoluciona la temporada. Eso sí, muchos admiten que «no había otra opción» pues «tanto por falta de jugadores como por motivos económicos no se podría haber conformado el equipo sin esta aportación».

En este sentido, el directivo del club, Santiago Moreno, explicaba que se habían quedado «con solo ocho jugadores» y que, además, tenían que asumir «una denuncia de 3.000 euros». Ante todo ello, existía el peligro real de no poder competir esta temporada, pero se llegó a un acuerdo con el Shanghai, con la mediación del Huracán CF, que ha llevado a este nuevo proyecto que empezó a andar oficialmente ayer con un empate a un gol ante el Castellón B.

Cabe matizar que, con estos jugadores, el Atlético Museros no puede ascender, porque en Tercera ya ocuparían plaza de extracomunitarios.