El PP de Onda criticó ayer el traslado de los conciertos de la Fira 2015 al pabellón deportivo Víctor Cabedo, ya que según los populares la medida «va a crear muchos problemas innecesarios a los vecinos». La concejala del PP María Prades recordó al respecto que «Onda dispone de una zona municipal que fue construida para la celebración de los actos multitudinarios y los conciertos». «Se trata de un lugar que cumple con todas las medidas de seguridad, con un aforo cuatro veces mayor que el pabellón deportivo y sin problemas acústicos», recalcaron en ese sentido desde el PP.

«Capricho» del alcalde

María Prades se refirió además al traslado de los conciertos como «un capricho del actual alcalde socialista y sus socios de gobierno, ya que la seguridad de los vecinos y las instalaciones municipales siempre son gestionadas por el alcalde y, por tanto, en esta responsabilidad y decisión nunca intervienen los miembros del Consell de Fiestas».

Además, la concejala del PP lamentó que entre los perjuicios que van a implicar esta decisión «destacan los problemas de ruido, suciedad, rotura de mobiliario urbano y desperfectos en propiedades particulares generados a los vecinos de la zona, cuando esta instalación deportiva alberga grandes eventos musicales para los que en absoluto está preparada desde el punto de vista técnico».

Además, apuntó a que «la falta de seguridad que puede ocasionar a los espectadores» la capacidad de la propia instalación cubierta. Así, indicó que según el actual plan de seguridad de ese recinto no se pueden superar las 2.720 personas. «Este aforo máximo, de cumplirse, dejará fuera de los espectáculos a muchos vecinos y de no cumplirse los pondrá en riesgo», dijo la edil.

Por otro lado, también denunció que a estas posibles molestias «se une la paralización de la normal actividad deportiva, durante tres semanas, de centenares de vecinos que utilizan estas instalaciones y de las competiciones de lo diferentes clubes deportivos locales».