El sábado el Peñíscola RehabMedic iniciará su tercera temporada en la máxima división de la Liga Nacional de Fútbol Sala, y lo hará con nuevas ilusiones y objetivos, para lo cual los aficionados verán nuevas caras en el equipo que entrena el madrileño Carlos Sánchez.

El técnico valoraba así la pretemporada del conjunto peñiscolano: «Creo que ha sido una buena pretemporada, sobre todo porque hemos hecho todo lo que queríamos, intentando adaptar a los nuevos jugadores, y estoy contento, ya solo con las ganas de comenzar la liga con buen pie».

Carlos Sánchez se muestra muy satisfecho con las cinco incorporaciones realizadas por el club este verano, que además se han acoplado a la perfección al vestuario. «Muy bien, son chicos jóvenes y en los personal todos se han acoplado con rapidez, al contar con la ayuda de los que ya estaban en el equipo para estar unidos. Eso creo que debe de ser una de las armas, pues si el grupo humano es bueno, serán capaces de poderse enfrentar a cualquiera».

Un Peñíscola que la pasada temporada dejó un listón muy alto. «Yo no creo en ese tipo de expresiones. La temporada anterior ya es el pasado, pese a recordar que fue buena, y no creo en los listones. Creo en el trabajo del día a día y de cada semana y será la competición la que nos podrá en su sitio. Nosotros a seguir trabajando, mirar atrás para que lo que hemos hecho mal no lo repitamos y lo que se haga bien intentar mejorarlo. No debemos de mirar a la pasada temporada, porque iniciamos un nuevo capítulo».

Pero la afición siempre quiere un poco más, «eso es normal y lógico, nosotros debemos de disfrutar de lo que tenemos, divertirse de que el equipo está en la Primera División, en una ciudad tan pequeña como es Peñíscola y debemos de luchar para que siga durante muchos años. No podemos meter presión desde la grada a unos jugadores jóvenes, que tienen una ilusión y ganas tremendas. Vamos a estar tranquilos, ser humildes, trabajar mucho, para ver si se logra algo bueno».