El central gaditano Pepe Castañó, expeditivo y por lo que se ve efectivo, abrió y cerró la cuenta anotadora con sendos cabezazos a la salida de una falta y saque de esquina, respectivamente. Y el Villarreal sumó la primera victoria de la temporada ante un peleón Real Murcia que se quejó amargamente del 2-1 de Villa por presunta falta al portero Pablo. A partir de ahí muy superior el conjunto de Javi Calleja. O más efectivo de cara al marco contrario.

El partido fue intenso. De idas y de venidas. De lucha titánica en el centro del campo. Allí intentaron imponer su ley el chileno Martín Arenas, o Sergio Lozano y Chuca por parte amarilla; en el bando murciano Alonso, Carrillo, Javi Vera y Dorado llevaron el peso del partido. Estuvo más dominado por el Villarreal, pero con pocas aproximaciones peligrosas. El Real Murcia despertó.

Una falta botada por el americano Akale fue perfectamente cabeceada por el gaditano Pepe Castaño para hacer subir el 1-0 en el marcador. Superada la media hora de juego el chileno Martín cabeceó a las manos del arquero Pablo. Y antes del descanso, y tras un córner, agarrón de Sergio Lozano a Dorado y el penalti lo transformó Javi Vera para poner el 1-1 justo antes del descanso.

En el segundo tiempo el protestado gol de Villa precedió a la borrachera de goles. Darío Poveda, Akale y de nuevo Pepe Castaño pusieron la clara ventaja. Uno de los más destacados de los murcianos, Javi Vera, firmó su doblete de un espectacular trallazo desde fuera del área. Pepe Castaño, de cabeza, cerró el marcador