Una hipotética supresión de la red de colegios concertados en la Comunitat Valenciana supondría —siempre que se conservara el mismo número de plazas escolares pero de carácter público— un aumento del gasto anual de la administración de 43,8 millones de euros. Así se afirma en el informe «El cumplimiento de los principios de economía, eficacia y eficiencia en la gestión de fondos públicos destinados a la enseñanza primaria en la Comunitat Valenciana», que publica el número de julio de la revista especializada Auditoría Pública.

El análisis ha sido realizado por el técnico de auditoría Joaquín Izquierdo Peris y la ayudante de auditoría de la Sindicatura de Comptes Raquel González Virgidiano. El estudio basa una de sus conclusiones en la comparativa del coste por unidad escolar de la red pública y de la concertada, de la que se deduce que «la administración educativa está obteniendo un ahorro teórico desde el punto de vista del gasto público, asociado a la existencia de los conciertos educativos».