Segorbe puso ayer el broche de oro a la semana de Entradas de toros y caballos que este año ha celebrado el décimo aniversario de la concesión como fiesta de interés turístico internacional con un encierro espectacular, brillante y muy vistoso.
Tal y como explicó uno de los caballistas participantes, José Carlos García, «hoy ha estado muy bien. No sabría decir si ha sido la mejor de la semana, pero hemos disfrutado durante toda la carrera».
Y es que el último de los encierros segorbinos dejó un buen sabor de boca a una semana de Entradas marcada por la inestabilidad meteorológica, el buen hacer de los caballistas participantes en cada encierro y el incidente más destacado como fue la cornada que recibió el sábado el caballo de Plácido Mínguez, que continua estable dentro de la gravedad que conlleva. El veterinario de la Entrada, José María Velilla, comentó ayer que Favorito, el caballo corneado, «está muy bien, estable, sin fiebre, pero tiene un problema importante y es que lleva dañada la uretra. Por lo demás, según informaron desde ambulancias Sierra Calderona encargados de cubrir el evento, «no se ha registrado ni un solo incidente médico en toda la semana en las Entradas, tan solo una cogida leve la tarde del jueves en el concurso de ganaderías y nada más».
A las dos en punto de la tarde, con el disparo de la carcasa, comenzó el ritual de la fiesta segorbina. Preparados en la plaza de los Mesones, los once caballistas que participaron ayer esperaban para agrupar a los seis toros, todos ellos coloraos, y el manso de la Ganadería de Germán Vidal de Cabanes y encabezar la bajada de la calle Colón. En perfecta sintonía, los toros salieron del Argén y fueron agrupados perfectamente por los caballistas para formar la conocida como forma de herradura.
Abriendo paso a la comitiva animal, Lázaro, Chova y Lliso fueron los encargados de abrir el camino a los astados entre los miles de espectadores que, a su paso, como si de una cremallera humana se tratase, aguantaron segundos antes de apartarse hacia atrás con el fin de de presenciar en primera fila, la subida de adrenalina que tan solo alguien que lo vive a pie de calle puede explicar.
En el flanco derecho Montero, Ardit, Zarzoso y Aparicio arroparon la bajada de manera perfecta, mientras que el izquierdo quedó magistralmente cubierto por los Salas, Calpe y Trabuco que, junto a Aparicio cerró el rombo en el que fueron los seis morlacos durante el trazado de la carrera.
Concurso de Ganaderías
Segorbe cerró ayer su concurso de ganaderías en el que Miguel Parejo, con 32 puntos, obtuvo el premio al mejor toro embolado con Primoroso; Vicente Benavent se alzó con la mejor tarde de vacas con 199 puntos y el mejor toro en puntas, con 25 puntos. El nuevo trofeo de entrada de toro con manso fue para la ganadería de Juan Faet.
