El Ayuntamiento de Castelló impulsará una segunda vuelta en las elecciones a la presidencia de la Junta de Festes si ningún candidato consigue la mayoría absoluta. La coalición progresista quiere garantizar que el nuevo responsable cuente con una mayoría clara ante el aluvión de alternativas que se presentarán. Esta medida también resta posibilidades a Jesús López, que confía en la división del voto para revalidar el cargo, que ostenta desde hace 14 años.
El consejo rector del nuevo patronato de fiestas se reunirá este jueves y convocará el proceso electoral. Primero se celebrará la asamblea constituyente que deberá elegir al nuevo presidente y ésta fijará la fecha del día de la votación. Está formada por 120 integrantes pertenecientes a diferentes sectores de la fiesta y de la sociedad civil de la capital de la Plana. Hasta ahora se ha venido realizando una única votación, pero por primera vez en la historia, el reglamento electoral que ha preparado el ayuntamiento plantea la celebración de una segunda vuelta, según avanzaron fuentes municipales.
El motivo del cambio en la elección de la asamblea de fiestas estriba en la alta cifra de alternativas que se postulan, una circunstancia que podría conllevar que el candidato más votado tuviera menos apoyos que la suma del resto de alternativas, lo que comportaría una Junta de Festes débil. Aquí no se puede emular a los ayuntamientos y no cabe la posibilidad de que se formen alianzas a posteriori. Por ello, ante la posibilidad de que nadie obtenga una mayoría absoluta, el ejecutivo local propone la segunda vuelta. Enfrentaría a los dos contendientes con más votos, y obligaría a los otros aspirantes a integrarse con los mismos en alianzas.
Esta iniciativa trastoca la estrategia de Jesús López. El presidente en funciones espera repetir con la ayuda de la fragmentación del voto, pero con el nuevo sistema electoral se le complica este objetivo, ya que los aspirantes podrían hacer frente común para poner punto y final a los 14 años de gestión de López.
La Junta de Festes afronta las elecciones más inciertas de su historia. En sus 14 años de presidente, López sólo tuvo un contrincante en las elecciones de 2006, en las que ganó de manera holgada. En las asambleas restantes no tuvo rival y fue elegido casi por aclamación. Han anunciado su interés de acudir a la cita electoral Juanvi Bellido, Javier Gimeno, Fernando Andreu y Jesús López. A esta retahíla podría sumarse una quinta alternativa.
Desde los colectivos festeros se señala a Juanvi Bellido y a Jesús López como los favoritos para hacerse con el mando en la Junta de Festes. Bellido fue presidente de la gaiata 5 y presenta un programa renovador en el que pretende potenciar la implicación de los colectivos festeros en la organización y fomentar las actividades en la calle. López, por su parte, sostiene que quiere continuar para evitar una supuesta intromisión de los «políticos» en la fiesta, en referencia a la coalición progresista. Desde la candidatura de Juanvi Bellido se acusa a López de «jugar sucio» para intentar desprestigiarlo, ya que según aseguran desde el mundo festero, López, que fue respaldado en sus 14 años de mandato por los alcaldes del PP; vincula a Bellido con los populares.
El futuro presidente, sea López o uno nuevo, afrontará una nueva etapa en fiestas. Con la entrada en vigor del patronato de fiestas -creado por obligación de la ley de Grandes Ciudades-, la Junta de Festes pierde atribuciones y deja de dirigir la gestión económica. Continuará organizando las fiestas, pero las contrataciones serán ratificadas por funcionarios municipales y tendrá que fundamentarse en la ley de Contratos Públicos.
