Con este panorama de placidez con el que ha comenzado la temporada, lo mío debe ser de otra cosa, porque hasta a Marcelino veo más tranquilo después de recetarle dos semanitas de grada en liga. Hoy volverá al banquillo, y espero que no tengamos que acordarnos de aquella estadística de que el equipo gana «casi siempre» con Uria en el campo.

A la espera de que el fútbol llegue al Madrigal (porque aquello del juego combinativo y no solo combativo , toque y posesión que por suerte el club ha grabado en su ADN durante tantas temporadas, está todavía por llegar), buenos son los resultados que se van cosechando y que van llenando ese saco del que habrá que echar mano y del que bien seguro nos acordaremos cuando vengan mal dadas. De momento nos conformamos, que no es poco, con solidez defensiva y definición arriba. Pegada. Eficacia. Hay equipos grandes , muy grandes, que han vivido históricamente de ello. Entrenadores que han sustentado su leyenda y palmarés sobre estos valores y han hecho bandera de ello sin añadir una pizca de fantasía, de espectáculo a su fútbol mas allá del golazo/ s de turno de su estrella y goleada final como justificación de todo . Lógicamente con un presupuesto bestial como colchón que compra a lo mejores arriba para poder sacar pecho. Es por ello que no deja de ser meritorio que en el Madrigal queramos algo más . Señal de que nos hemos acostumbrado a algo más. Y de que, con los mimbres confeccionados, poco dudemos que ese algo más va a llegar . Aunque no se traduzca en títulos.

En Granada se rompieron varias barreras el pasado fin de semana: Por fin se gana fuera tras nueve meses, por fin se ganó en Granada tras toda una vida, y por fin se marcó un gol en el estadio de los Cármenes desde que Abû ?Abd Al·lâh «az-Zughbî» Mohammed ben Abî al-Hasan ?Alî , (Boabdil el chico para los amigos) perdiera la Alhambra entre lagrimas y bajo los pescuezos la Sultana Aixa, entiéndase como su señora madre.

Pero si algo me llamo la atención fue del listado de lo que no jugaron de inicio, pese a que ya de por si aquel once era un señor equipo: Asenjo, Rukavina, Musacchio,Bonera, Jokic, Jonathan , Bruno, Denis, Samu, Adrián, Baptistao? Entre lesionados, sancionados, o en proceso de aclimatación quedó fuera una escuadra conformada, casi toda ella, por internacionales. Y eso, en Villarreal, hay que remontarse a la época anterior al descenso, aquella donde se gastaba pasta a paladas, para encontrar un caso si quiera similar

Eso no asegura ganar hoy en Viena. Cualquier que hay visto in poco esta pelicula con anterioridad sabe de la dificultad de meter en un equipo 10 caras nuevas de un partido a otro. Si, además, muchos de ellos son recién llegados y no tiene ritmo, la cosa se complica bastante más. Y los muchachos del Rapid no serán el Madrid, pero son un equipo en su máxima expresión. Y hace un mes le metieron tres al Ajax en el Amsterdam Arena para dejarlo en la cuneta. Cuidado.

Con todo interpreto que la sensación de malestar, de asco y vomito incluso si me permiten, más bien la han provocado la imagen de esos machotes que, lanza en mano como si fueran Ivanhoe, destrozaban esta semana a rompesuelas en Tordesillas. Lástima no haberse llevado con el a tres o cuatro por delante .