Peñíscola dijo ayer domingo adiós a sus fiestas patronales en honor de la Virgen de la Ermitana. En realidad fue un «hasta luego» que estuvo acompañado por una programación en la que destacaron actos como el XXXI Ciclo de Conciertos de Música Clásica Ciudad de Peñíscola, con la interpretación de la Misa y Plegaria del Pescador del maestro Vittorio Cacciatori y letra de Juan Bautista Simó. En el concierto intervinieron la Coral Polifónica de Peñíscola y la Orquesta de Cámara Santa María de Peñíscola, dirigidas por Salvador García Sorlí. El acto, que se desarrolló a mediodía en la Iglesia Parroquial Santa María, puso el broche de oro musical a un ciclo que mueve anualmente a muchos amantes de la música clásica. Por otro lado, peñiscolanos y visitantes disfrutaron del magnífico desfile de las escuadras de la Associació Cultural de Moros i Cristians, que partió a las 19.30 horas de la ciudad antigua. Un acontecimiento lleno de cromatismo y belleza visual al que siguió la actuación de la coral Polifónica de Peñíscola, acompañada en esta ocasión por la Asociación Musical Virgen de Ermitana.

Además, la jornada de despedida festiva de ayer domingo contó con un bautismo de buceo matutino, un acto organizado por el Club de Busseig Papa Luna de Peñíscola destinado a mayores de 16 años.

Finalmente, un ramillete de fuegos artificiales, que iluminó la noche peñiscolana, despidió desde la playa Sur las celebraciones en la localidad.