La política de desahucios provocó ayer en el pleno del Ayuntamiento de Castelló la primera grieta entre el gobierno municipal y Castelló en Moviment. La coalición de progreso rechazó una propuesta de sus socios sobre vivienda, que entre otras medidas, planteaba penalizar las viviendas vacías de los bancos, y CS en Moviment tumbó en respuesta la alternativa del PSPV y Compromís.
Las tres formaciones coincidieron en el resto de cinco mociones debatidas en la sesión plenaria, pero esta disensión pesó en el ambiente, ya que evidenció la primera derrota del bipartito en un pleno. No afecta a la hoja de ruta emprendida por el ejecutivo en materia de desahucios, en la que también trabaja CS en Moviment, pues la enmienda echada atrás del equipo de gobierno pedía crear una comisión sobre vivienda que ya existe actualmente. Pero pone de manifiesto unas inesperadas fricciones en uno de los temas capitales incluidos en el pacto de gobierno suscritos por las tres fuerzas.
CS en Moviment destacó ayer el trabajo el PSPV y Compromís con el protocolo antidesahucios, pero reclamó más contundencia con los bancos y más esfuerzos para facilitar viviendas a los afectados. También discrepó de la valoración de los 100 días de la alcaldesa, Amparo Marco, y el vicealcalde, Enric Nomdedéu. «No estamos satisfechos con el balance. No se ha cerrado el círculo de los desahucios», afirmó el concejal de Cs en Moviment, Iñaki Vallejo, en referencia a las declaraciones que efectuó Marco en la rueda de prensa del miércoles. «Hay 45 lanzamientos desde julio», sostuvo Vallejo, quien criticó, además, la firma de un convenio entre el ayuntamiento y el Banco Santander sobre cursos de formación financiera.
CS en Moviment llevó una iniciativa de la PAH que abogaba por gravar las vivendas sin ocupar de los bancos, e instaba a estos a últimos a comprometerse «a negociar moratorias hipotecarias, condonación de la deuda, dación en pago o la permanencia de los afectados con alquileres sociales».
La concejala de Vivienda, Ali Brancal, rebatió que una propuesta de tal magnitud no podía aprobarse con «prisas» y sin estudiarse, y recordó que el ejecutivo actúa en el tema de los desahucios en varios ámbitos. Citó las negociaciones con entidades financieras para que ofrezcan alquileres sociales o la próxima puesta en marcha de un servicio de asesoramiento. Sostuvo que algunas medidas de la PAH exceden la competencia municipal, al tiempo que descartó gravar el IBI a los pisos vacíos porque legalmente, adujo, es inviable.
El pleno rechazó las mociones de vivienda presentadas por CS en Moviment, PSPV y Compromís, y Ciudadanos. «Hoy-dirigiéndse al gobierno-han perdido una votación, pido menos chulería y más diálogo», soltó el popular Vicent Sales.
Gratuidad en los parados
Los cinco partidos acordaron estudiar la posible gratuidad del transporte público a los parados. El equipo de gobierno se comprometió a presentar el informe de viabilidad en dos meses.
