Empate en un partido en el que los dos goles conseguidos se lograron a balón parado en el segundo tiempo. Igualada entre el San Pedro y el Vinaròs que se puede considerar justa a tenor de los méritos realizados por ambas escuadras, después de un primer tiempo bastante trabado y un segundo periodo en el que se pudo disfrutar de un juego más abierto, con más alternativas para ambos conjuntos.

En el primer tiempo, el viento y la lluvia que cayó durante buena parte del mismo, deslució el control del balón y el juego fue de escasa calidad con dominio alterno y escasas oportunidades de gol. En este tramo del encuentro, las defensas superaron a las delanteras, sin un juego demasiado fluido y poco vistoso.

Por su parte, en el segundo tiempo y con la mejora meteorológica, los dos equipos hicieron un fútbol más ofensivo y algo más vistoso. Pero, a pesar de la mayor fluidez, se mantuvo el dominio alterno, aunque se pudo ver más juego que en el acto inaugural.

Se adelantaron los visitantes en el marcador en el minuto 63 al culminar Fone una falta señalada en la frontal del área grauera. Reaccionaron los locales, después de este mazazo, y dispusieron de varias ocasiones para empatar, pero no sería hasta el minuto 77 cuando al sacar una falta muy bien el local Carlos Martín le sirvió un buen balón a Álex Queral. Éste se encargó de establecer el empate con el que terminó el encuentro en el Javier Marquina.

En definitiva, justo reparto de puntos, aunque en la recta final del partido los graueros tuvieron alguna opción más que su rival para llevarse los tres puntos, pero el oficio y la veteranía de los vinarocenses lo impidió.