Leo Baptistao salió al rescate ayer del Villarreal con un gol que mete de lleno al conjunto amarillo en la lucha por el liderato del Grupo E , ahora encabezado por el Rapid de Viena con dos victorias consecutivas. El jugador cedido por el Atlético de Madrid está sin duda aprovechando la lesión de Cedric Bakambu para reivindicarse, con dos goles en Liga -el último dio el liderato al Villarreal en Liga-y dos en Europa. El brasileño tiene la suerte de compartir ataque con Roberto Soldado, jugador que busca constantemente la asistencia para poder descolocar a la defensa rival, si bien, todo el mérito del tanto que dio los tres puntos a a los amarillos en esta Fase de Grupos fue de Leo Baptistao. Él solo se construyó una jugada desde medio campo, que acabó perforando la meta checa.

Una victoria que confirma el ben momento que traviesa este Villarreal, quien pese a las bajas en ataque y defensa, lleva ya un balance de seis victorias, un empate y una derrota en sus ochos partidos e la temporada.

LA victoria de anoche en Europa se necesitaba para seguir con ese estado anímico que tiene todo equipo «grande» y que le permitirá luchar por mantener el liderato antes del parón liguero este domingo en el Ciutat de Valencia.

Después de caer en el debut de la fase de grupos con hasta diez cambios en el once que presentó en Viena, Marcelino no se la jugó está vez y puso en liza un once con muy pocos cambios respecto al que ganó al Atlético de Madrid. Mantuvo a la pareja de atacantes Bautista-Soldado y a la de centrales Víctor Ruiz-Eric Bailly disponibles, pese a la carga de minutos. Sí dio descanso a Mario. Barbosa se confirmó como el portero de Europa League, y Jonathan Dos Santos formó pareja con Bruno en el centro del campo.

El partido empezó con una gran intensidad. Nada que ver con el encuentro en Viena. El Villarreal dominaba por completo también favorecido por el juego del Viktoria Plzen, que mantenía una línea defensiva muy adelantada.

Pronto empezaron a llegar las ocasiones, sobre todo a través de Castillejo que encontró en su banda un gran agujero. El malagueño fue el que protagonizó las primeras embestidas, pero no fue hasta el minuto 10 cuando se produjo el primer disparo entre los tres palos que Kozacik detuvo sin problemas.

Sin duda fue seis minutos después cuando Leo Baptistao tuvo la ocasión más clara para inaugurar el marcador, tras quedarse solo ante el portero después de recibir una gran asistencia de Nahuel.

La primera media hora fue de asedio constante pero la falta de acierto volvía a ser protagonistas. Si Leo Baptistao se topaba con el portero, momentos después el balón golpeado por la cabeza de Soldado salió rozando la escuadra. La ansiedad al ver que n ose materializaban las ocasiones empezó a pasar factura y el Villarreal bajó la intensidad en el último cuarto de hora de la primera mitad que fue aprovechado por el conjunto checo para empezar a adueñarse del juego y creando peligro casi siempre a través de las botas de Duris.

Con esa angustia se fue al descanso y también se comenzó al segunda mitad. El Villarreal inconscientemente se vino atrás esperando sus opciones a la contra y curiosamente, casi cuando pero lo estaba pasando el conjunto amarillo, llego «el mago» Baptistao, robó un baló en mitad de campo y se enfiló directamente a portería sorteando hasta a dos contrarios y con un disparo raso al primer palo lograba el 1-0, que no se antojaba definitivo con 35 minutos por delante y más jugando en casa.

El tanto acabó con las fuerzas del Viktoria Plzen, que además vio como cualquier esperanza de empate se diluía con la expulsión de su capitán por doble amarilla. La entrada de Samuel García y de Manu Trigueros también aportó algo de frescura a un equipo que sufre siempre en los minutos finales, donde llegan al límite físicamente.

Ahora así, cumplido el objetivo de colocarse en la terna por el liderato europeo, a Marcelino no le queda otra que optar por las rotaciones para conseguir mantener el liderato de la otra competición en liza, la Liga, este domingo en el Ciutat de València ante el Levante.