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De los tejidos a la aventura

De los tejidos a la aventura

La Fábrica Giner fue un complejo industrial que emuló las colonias industriales catalanas que nacieron junto a los ríos Ter o Llobregat. En este caso el río es el Bergantes y la colonia no estaba en Catalunya, sino en Morella. El pasado industrial del complejo que contaba con naves, fábrica, ermita, colegio y residencia para los trabajadores, todavía se aprecia en un lugar que se ha convertido en un espacio de ocio, alojamiento, servicios o restauración de patrimonio. La historia se inició en 1863 cuando la sociedad «Giner, Guimerá y hermanos» adquirió los terrenos. Los industriales, sobre la base de un antiguo molino, crearon un complejo de producción textil. El complejo funcionó hasta 1926 produciendo tejidos e hilaturas.

Reconvertida y con nuevos usos, la Fundación Blasco de Alagón se encarga ahora de la gestión y difusión de la fábrica. En la Fábrica se puede visitar la antigua ermita. Un espacio que se ha reconvertido en un museo que relata, paso a paso, la historia de la familia Giner, fundadora del complejo. Paneles y enseres de la familia evocan un pasado de estos burgueses que quisieron introducir la industria en Els Ports. Sus enseres de cocina, camas, mesas o una impresionante bañera de la época recuerdan la diferencias que había entre dueños y proletarios, que ocupaban lo que hoy es el albergue Fábrica Giner.

En el camino que accede a la ermita se encuentra el estanque, desde el que se divisa una buena vista general del complejo. No falta una chimenea de más de 20 metros de altura construida en ladrillo macizo.

Las antiguas habitaciones para los trabajadores «solteros», conforman hoy el espacio del albergue, con capacidad para 60 personas y servicio de comedor. Junto al albergue también nos podemos alojar en una antigua casa, reconvertida hoy en vivienda de turismo rural.

Albegue y casa se ubican junto al Centro BTT Els Ports, desde donde podemos acceder a decenas de rutas de bicicleta de montaña. Se trata de 900 kilómetros de recorridos señalizados que nos pueden llevar hasta Portell o la Virgen de la Balma en Sorita, pasando por Forcall o todo el término de Morella. En el centro, además de las rutas señalizadas, se ofrece alquiler de bicicletas.

Se trata de un entorno para turismo de grupos, familias o parejas. Desde que el albergue reabrió sus puertas, de manos de la Fundación, se ha convertido en epicentro para los colegios, bandas de música o clubes deportivos. El entorno de la Fábrica cuenta con amplias zonas verdes: jardines y una impresionante chopera junto al río Bergantes. En verano no falta la piscina, muy concurrida, sobre todo con visitantes de Morella o pueblos de Els Ports, pero también utilizada por los que se alojan en la Fábrica.

Las antiguas naves de la fábrica también acogen el Taller de Restauración de la Fundación Blasco de Alagón. Por este taller pasan cada año «peirons», tallas, retablos procedentes de edificios nobles del interior castellonense. El taller, con más de 10 años a sus espaldas, ha restaurado decenas de obras de arte de Teruel y Castelló. Su obra más reciente es la exposición sobre los «peirons» de Els Ports y el Maestrat.

Saltapins, la estrella

Pero sin duda lo que más atrae a los visitantes a la Fábrica Giner es el parque de aventura Saltapins. Pionero en la Comunidad Valenciana ofrece tres circuitos con tirolinas, lianas, redes, puentes tibetanos, troncos. Cada año miles de personas se ponen el casco y el arnés para deslizarse entre los árboles. Cada año el parque va creciendo. Este año se han instalado nuevas pruebas en el circuito rojo. Media hora más de diversión, según apuntan sus responsables. Desde Saltapins se ve una vista privilegiada de Morella y de la Fábrica.

Otras de las actividades son rutas a pie o a caballo.

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