Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se han incautado en tan solo una semana de un total de 2.491 plantas de marihuana que se estaban cultivando de forma ilegal en la provincia de Castelló. Las dos últimas intervenciones -comunicadas ayer por la Guardia Civil y por la Policía Nacional- elevan a tres el número de incursiones contra el cultivo ilegal de esta planta y a nueve las detenciones totales de los presuntos autores.
Si a principios de semana, la Comandancia de la Guardia Civil informaba que se había desmantelado una plantación escondida entre naranjos y un secadero de marihuana en el municipio de Sant Jordi en el que había -en diferentes fases- un total de 750 unidades, la de ayer la superaba en número. Según fuentes de la Benemérita, la nueva plantación, esta vez situada en Santa Magdalena de Polpis incluía 941 unidades cultivadas en una finca agrícola del término de esta población del norte de la provincia. En la operación fue detenido un vecino de Vinaròs como presunto autor de un delito contra la salud pública.
Los guardias civiles sorprendieron al detenido en una finca agrícola de naranjos cuando efectuaba labores de custodia y regadío de la plantación de marihuana.
El hombre huyó al verse sorprendido por los agentes, pero fue interceptado momentos después. En total, la Guardia Civil encontró en la finca 941 plantas distribuidas en dos grupos en fase de crecimiento y floración. El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Vinaròs.
De igual forma, la Policía Nacional informaba ayer de la detención de cuatro personas como presuntas autoras de un delito contra la salud, tras localizar más de 80 plantas en sus domicilios situados en Castelló y Vila-real.
Según las mismas fuentes, el primero de los cultivos comprendía 26 plantas, asistidas en su crecimiento por un foco, en una habitación de un piso de la calle Parque del Oeste. El detenido tiene 38 años de edad, y un amplio historial policial. La segunda serie de arbustos, 44 en total, se encontraron en un piso de la avenida Casalduch, en el cual el detenido de 54 años de edad, y con antecedentes policiales por hechos similares, era sorprendido con un cultivo en una terraza de su vivienda. Las últimas detenciones se realizaron en un maset de la partida Pinella de Vila-real, en el que los agentes se encontraron una veintena de plantas de marihuana. Han sido detenidos una pareja de españoles de 24 y 32 años de edad.
