Aunque suene paradójico, las obras de mejora en la plaza Mallorca han puesto en pie de guerra a la asociación de vecinos Raval de la Trinitat (la que más socios tiene en Castelló), que denuncia que dicha actuación es innecesaria y limita el espacio disponible. La entidad vecinal acusa a la asociación rival Trinidad Centro de haber promovido el proyecto pese a ser minoritaria y no tener representatividad en el barrio.
En la plaza Mallorca se han instalado esta semana varios bancos, se ha cambiado la fuente y está previsto que próximamente se coloquen aparatos de gimnasia para mayores. Se trata de una actuación aprobada por el anterior gobierno del PP a través del mecanismo de los presupuestos participativos. La presidenta de la asociación Raval de la Trinitat, Inma Roig, afirmó ayer que su colectivo ya se opuso en su día a un proyecto que surgió a propuesta de la asociación Trinidad Centro. Según señaló, esta última es una entidad «fantasma» que no representa a los vecinos. Detrás de ella, añadió, se encuentra la federación vecinal de Amalio Palacios, sin implantación en el Raval.
«En la junta de distrito nos opusimos porque consideramos que supone un gasto innecesario. La instalación de bancos y aparatos de gimnasia reduce aún más el espacio disponible en la plaza, que es un punto de encuentro para los vecinos, además de acoger las fiestas de San Cristóbal y la fireta de Santa Llúcia», aseveró Inma Roig.
La asociación elevó ayer una queja al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló, que argumentó que se trata de una actuación heredada del pasado mandato. También se han recogido firmas de los residentes de la plaza Mallorca en contra del proyecto.
