Podía haberle tocado un rival de Tercera o Segunda División B, pero finalmente será uno de Seguda, la SD Huesca, la que se enfrentará al Villarreal CF en dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Los oscenses, que quedaron exentos la pasada ronda, pondrán a prueba al equipo de Marcelino García Toral en la primera fase del torneo en la que entran en juego los de Primera aunque el submarino ya ha dejado claro que va a por todas en esta edición del torneo copero.

La eliminatoria se disputará a doble partido. La ida está fijada el 2 de diciembre en el campo del rival de inferior categoría, mientras que la vuelta se jugará quince días después aproximadamente (16 de diciembre). Todos los emparejamientos se disputarán en esas fechas con la salvedad del defensor del título, el FC Barcelona, que debido al Mundial de Clubes cambiará sus fechas contra el Villanovense al 28 de octubre (ida) y el 2 de diciembre la vuelta.

El Huesca es un clásico a caballo entre Segunda B y Segunda, que el año pasado superó tres rondas en Copa hasta caer contra el Barcelona precisamente en dieciseisavos de final. En la competición doméstica esta temporada se está mostrando algo irregular ya que, a estas alturas de la competición, es decimotercero con un bagaje de dos victorias, cuatro empates y dos derrotas.

Su entrenador es el exjugador de fútbol Luis García Tevenet, con el que el año pasado logró el ascenso de categoría (superó en la promoción al Racing de Ferrol y el Huracán Valencia), y en su plantilla se encuentran futbolistas de la talla del portero Leo Franco o el centrocampista Fran Mérida, dos nombres propios de la Liga española en su momento.

«Nos enfrentaremos a un rival apetitoso que ahora es el líder de la Primera División, que practica un buen fútbol y que es para disfrutar y estar motivados», dijo el entrenador del Huesca ayer.