Los atractivos del duelo que disputa hoy el Villarreal se acumulan. Como se esperaba, ni Real Madrid ni Barcelona fallaron ayer ante Levante y Rayo Vallecano respectivamente y han superado en lo más alto de la tabla al conjunto de Marcelino. Al reto para el submarino de intentar recuperar el liderato, se suma el interés por ver un enfrentamiento entre los dos equipos revelación de esta primera parte de la temporada. Hasta el tropiezo de hace dos semanas en el Ciutat de València, los amarillos presentaban un currículo inmaculado con cinco victorias consecutivos y el empate contra el Betis. Por su parte, los celestes todavía no conocen la derrota y pueden presumir de haber goleado al Barça de Luis Enrique (4-1).

Además, tanto para los de Eduardo Berizzo como para los de Marcelino, este encuentro se presenta como una reválida. Ambos han mostrado versiones muy interesantes de sí mismos hasta la fecha, con un juego basado en una propuesta muy ofensiva y atractiva, pero necesitan no bajar el ritmo para que se les siga tomando en serio. Éste es uno de esos partidos que pueden marcar si un equipo es capaz de luchar por los puestos de honor o simplemente por destacar entre la clase media de la Liga BBVA.

El entrenador amarillo es consciente de la relevancia de este duelo y, por eso, apuntaba el viernes que el Villarreal está obligado a ganar. Tras la derrota contra el Levante, aunque el equipo siguió ostentando el primer puesto de la clasificación, el Villarreal dejó unas malas sensaciones que se deben desterrar cuanto antes.

Para hacerlo cuenta a su favor con la recuperación de gran parte de su pólvora ofensiva. La convocatoria incluye a Bakambu, Leo Baptistao y Denis Suárez, bajas en los últimos encuentros del submarino. Por contra, Marcelino ha tenido que prescindir de una pieza clave en este Villarreal, Bruno Soriano. El de Artana ya se marchó del Ciutat de València con problemas en su tibia izquierda. Aunque el técnico asturiano aseguró que no supondría un inconveniente para jugar con España, el mediocentro ha visto como se ha quedado sin poder vestirse la camiseta de la selección y tampoco estará disponible para saltar al campo frente al Celta.

Además de Bruno, tampoco han entrado en la citación por lesión los habituales Asenjo y Musacchio, que apuran sus recuperaciones, Adrián López que todavía arrastra problemas físicos en el recto anterior de su pierna izquierda y Bojan Jokic, expulsado contra el Levante. Quien entra en la convocatoria, por primera vez en compromiso liguero, es el central italiano Daniele Bonera.

Con los más habituales

Tras el reposo por los compromisos de las selecciones, lo más lógico es que Marcelino apueste por los hombres más habituales. Sólo Bruno se caerá de un once que contará con Areola en puerta y Mario, Bailly, Víctor Ruiz y Jaume Costa como zagueros. Sin el capitán amarillo, Pina y Trigueros serán la pareja de pivotes mientras que Nahuel y Samu Castillejo deberían formar en los extremos. Delante será fijo Roberto Soldado pero la duda podría aparecer en el nombre del jugador que debe acompañar al ariete. Antes de su lesión, Bakambu se había establecido como pareja de Soldado, pero Baptistao también cuajó varias buenas actuaciones hasta que los problemas físicos le impidieron estar en el Ciutat de València.

En el lado vigués, Berizzo todavía no podrá contar Andreu Fontás, pero recuperará a un jugador clave en su sistema como es Augusto Fernández. El mediocentro chileno regresará al once, tras recuperarse de a rotura del tendón extensor del segundo dedo de su mano derecha, y hará pareja con Wass.

En la delantera, el técnico argentino formará con sus hombres más peligrosos. Iago Aspas será el delantero centro, mientras que por detrás suyo formará la línea de tres compuesta por Orellana, Tucu Hernández y Nolito. Sin Fontás, Sergi Gómez se mantendrá en la línea defensiva junto a Hugo Mallo, Cabral y Jonny. Sergio Álvarez se mantendrá en la puerta.

Los pontevedreses arriban a El Madrigal en puestos de Champions pero, aunque todavía no han perdido, también es cierto que han acumulado dos empates consecutivos contra el Eibar y el Getafe. Los celestes querrán reivindicarse para continuar entre los puestos que dan acceso a la máxima competición continental. Además Berizzo pretenderá lograr una íntima venganza, ya que su equipo el año pasado perdió 4-1 en Vila-real.