La falta de control por parte del Ayuntamiento de Castelló en las cuentas de la antigua Junta de Festes generó dobles subvenciones en materia de fiestas en trece entidades vecinales. Con la vieja Fundación de Fiestas, la junta actuó como un ente independente y el interventor municipal no tenía acceso a toda su información contable. Ello hizo que los técnicos locales carecieran de mecanismos para detectar el pago en 2014 de subvenciones por parte de la junta a trece ciudadanas que, a su vez, recibieron dinero del consistorio en materia de fiestas, según explicaron ayer fuentes del equipo de gobierno y de las federaciones vecinales.

El vicealcalde, Enric Nomdedéu, y la regidora de Participación Ciudadana, Ali Brancal, se reunieron ayer con representantes del tejido asociativo para abordar la polémica de las supuestas duplicidades de subvenciones vecinales. El ejecutivo local logró cerrar el conflicto dos meses después de iniciarse. Para ello, insistió en exculpar de esta doble subvención a los colectivos implicados y reiteró que esta «confusión» ha sido consecuencia del descontrol existente con la antigua Fundación de Fiestas, que ya ha sido sustituida por un patronato.

Nomdedéu indicó que este doble pago fue legal y remarcó que el ayuntamiento no tenía conocimiento de las ayudas que aportaba la Junta de Festes a los festejos de barrio porque su gestión era ajena a la contabilidad municipal. Con la fundación, la Junta de Festes -cuyo 80 % del presupuesto procede de los fondos del ayuntamiento- operaba como una empresa privada. A final de cada año presentaba al consistorio un balance general, pero el interventor advertía en sus sucesivos informes anuales que no había podido realizar «una inspección de la contabilidad de la fundación» al no fundamentase en la Ley de Contratación Pública.

Y una de las consecuencias de esta falta de transparencia fue una doble subvención vecinal en fiestas en 2014. El ayuntamiento sólo puede pagar una vez este concepto, pero desconocía el operativo de la junta. Los técnicos locales alertaron este agosto al nuevo gobierno de ello y en un informe recomendaron la retirada de las sillas y mesas de fiestas de las subvenciones como solución al doble pago.

Acuerdo

Nomdedéu admitió su error cuando utilizó la palabra «fraude» en el pleno de septiembre para referirse a esta duplicidad y se comprometió a restituir el nombre de las asociaciones afectadas en la próxima sesión. No obstante, recordó que en septiembre ya exculpó a las mismas de esta práctica y que responsabilizó a una falta de control.

Asimismo, subrayó que estudiarán costear las sillas y mesas de fiestas a aquellas entidades sin ayudas del nuevo patronato.