La asociación ecologista Gecen ha exigido a la administración que no indemnice a los «especuladores de suelo con dinero público ni de cualquier otra forma».

Según informó Gecen, «la especulación urbanística ha conllevado miseria económica y social y destrucción medioambiental del territorio, todo ello unido a intensa corrupción política y anteposición del interés privado al público».

«Ante tal condena impuesta por unos pocos al conjunto de nuestra sociedad no cabe premio alguno ni al especulador ni al político corrupto, más al contrario, entendemos que cabe exigir responsabilidades contundentes a quienes organizaron tal fiesta especuladora y cabe recuperar el territorio y el dinero», añadió el colectivo.

La asociación ecologista ha destacado que «zonas que forman parte de los programas de actuación integrada (PAI) contienen valores medioambientales significativos que hubieran sido objeto de protección sin la presión del hormigón». «La amputación de zonas húmedas litorales protegidas, de los ecosistemas y paisajes naturales de nuestra costa y, por consiguiente, la disminución drástica de la biodiversidad que depende de dichos espacios son la consecuencia medioambiental y territorial más evidente», lamentó.

Gecen entiende que el frente litoral no urbanizado, «rehén de los PAI, debe protegerse en su integridad independientemente de su clasificación actual, y ello implica por ejemplo a los PAI Benicàssim Golf, Doña Blanca Golf o Sant Gregori Golf».

«No se trata únicamente de catalogar los PAI existentes y luego, tiempo sin concretar, analizar caso por caso para vete a saber qué resultados se obtendrán de dicho análisis, sino que consiste en modificar la legislación referente a la ordenación del territorio que acabe con el hormigón sin pagar dinero público», agregó.