El Ayuntamiento de Benicàssim prevé establecer unas sanciones entre 200 y 600 euros por el incumplimiento de la nueva ordenanza municipal para la prevención y control del mosquito en el municipio. El equipo de gobierno presentó en la comisión del lunes el borrador de la nueva ordenanza para que los grupos de la oposición puedan realizar sus aportaciones, y la misma será presentada esta tarde en el Consejo de Participación Ciudadana.

La nueva ordenanza regulará el cómo, cuándo y dónde se tendrá que realizar el tratamiento de prevención y control de los mosquitos en el término municipal y la normativa regulará tanto las actuaciones en zonas públicas, como las obligaciones de los vecinos en sus propiedades privadas. La alcaldesa, Susana Marqués, indicó que las sanciones se han establecido en leves (hasta 200 euros), graves (hasta 400) y muy graves por la que se podrá pagar hasta un máximo de 600 euros.

«Pero más que sancionar lo que se busca es concienciar», insistió la primer edil. El objetivo del equipo de gobierno es poder llevar la ordenanza a aprobación en el pleno del próximo mes de noviembre. «Una ordenanza que recoge buenos hábitos de uso doméstico para que ayudemos entre todos a controlar las plagas y proliferación de estos mosquitos que tanto daño hacen», explicó Marqués. Una vez aprobada se remitirá a colectivos, asociación y el ayuntamiento llevará a cabo campañas de divulgación.

En el consejo de esta tarde al que están convocados todos los colectivos vecinales, también se explicará el proceder de los nuevos presupuestos participativos.

«Vamos a abrir un cauce más participativo porque queremos que los colectivos vecinales sean los protagonistas». Para ello, el ayuntamiento va a crear unas mesas técnicas en las que habrá representantes vecinales, técnicos municipales y políticos, «que evaluarán, filtrarán y priorizarán las actuaciones y poderlas ejecutar o bien con recursos ordinarios del capítulo de inversiones de los presupuestos, o bien con la incorporación de remanentes anual que se produzca», señaló Marqués quien quiere una «participación activa de los diferentes colectivos y asociaciones del municipio».

Por último, el orden del día del consejo incluye un punto de despacho extraordinario «por si se puede avanzar un poco acerca de unas líneas generales del presupuesto 2016».

Nueva canalización de pluviales

El Ayuntamiento de Benicàssim va a actuar en una nueva canalización para que las aguas pluviales no viertan al mar. La alcaldesa, Susana Marqués, presentó ayer el proyecto de actuación urgente en el que se incluyen trabajos en distintos puntos para mejorar la red de alcantarillado de aguas pluviales y residuales. Las zonas en las que el consistorio va a actuar son las calles Baladres, La Comba, Ausias March, Les Oliveres, Il·lustració, Quatre Camins, Columbretes y Doctor Fleming. Además de evitar el vertido al mar, los trabajos conseguirán que no se formen grandes charcos en algunas de las zonas escogidas y también «habíamos tenido problemas de presiones de red que había que solucionar para evitar que se aliviara el colector por alguna zona de propiedad privada», explicó Marqués.

Las actuaciones que se realizarán en estas zonas serán de diferente índole. Por un lado, en la calle Baladres, casi al final del Paseo Pilar Coloma, el ayuntamiento prevé llevar a cabo un recrecido en la solera para facilitar el desvío de ese agua al colector de residuales que discurre paralelo al paseo marítimo. Para ello, la actuación contemplará la colocación de un tubo de 250 milímetros con su correspondiente pozo de registro.

En la calle Columbretes, que cruza la Gran Avenida y finaliza en la zona del Eurosol, se realizará un aliviadero sifónico que aliviará la carga de agua en episodios de lluvia. En las calles Il·lustració y Quatre Camins (casco urbano), también se derivarán los problemas de carga de agua en lluvia hacia un colector de residuales paralelo a la zona.

Y por último, en las calles La Comba, Ausiàs March, Les Oliveres y Doctor Fleming (casco urbano y zona sur), se ubicarán nuevas canalizaciones con pozos de registro y rejillas reforzadas que puedan soportar el peso de la actividad en superficie tanto de vehículos como de peatones.

Estas zonas en las que el ayuntamiento va a actuar son demandas que han realizado los vecinos y, cabe recordar, que el año pasado el consistorio actuó en la urbanización de La Parreta, en concreto en la calle Río Tajo, donde se realizaron obras de ejecución del colector de aguas pluviales. Tanto en este caso como en los puntos en que se va a actuar próximamente, el consistorio evitará inundaciones cada vez que llueve, con los consiguientes problemas que ocasiona esta situación para los vecinos.