Los sindicatos amenazan con convocar una huelga si Ascer insiste con sus propuestas de ajustes en el nuevo convenio laboral. Ambas partes se vuelven a reunir hoy tras varios meses sin verse las caras. Solo queda un año para que expire la prórroga del actual marco laboral tras doce meses de negociaciones infructuosas.
«Antes de que nos quedemos sin acuerdo habrá huelga», señaló Vicent Ortells, delegado de Comisiones Obreras. La extinción del convenio supondría la aplicación del Estatuto del Trabajador, es decir, entrarían en vigor unas mínimas condiciones laborales y se quedarían sin efecto los derechos sociales conseguidos en las últimas tres décadas, advierten los sindicatos. El plazo del convenio finalizó en 2015 y desde entonces hay dos años para que empresarios y trabajadores negocien un nuevo acuerdo. En este intervalo de tiempo permanece operativo el convenio antiguo.
Ascer y las delegaciones de CCOO y UGT retoman esta tarde las negociaciones en la sede de la patronal. Empezaron en octubre, en diciembre se suspendieron son acuerdo, y en mayo hubo una última intentona también sin éxito. En dicho mes, los sindicatos convocaron una manifestación para exigir un convenio «digno» a la patronal, pero desde entonces las posiciones no se han movido un ápice.
Las centrales sindicales piden que se mantengan las mismas condiciones del actual convenio del azulejo, en el que recuerdan que ya asumieron concesiones. Ahora aceptan una subida moderada de los salarios, pero consideran inasumibles el resto de propuestas de recortes.
En materia de retribuciones, Ascer propone un aumento salarial anual del 0,3% durante los dos años que se prolongaría el convenio. También plantea la creación de una nueva escala salarial que recoge una reducción de 200 euros del salario base, la congelación de la antigüedad, una flexibilización de la jornada laboral y recortes «en derechos sindicales», añadieron los sindicatos.
La patronal esgrime la incertidumbre existente en los mercados internacionales para justificar estos cambios en el convenio. Se tratan de medidas que se adaptan a las actuales circunstancias, resalta. Para los sindicatos, esta propuesta supone vaciar de contenido el marco laboral del azulejo.
A la reunión de hoy, los sindicatos acuden con pocas esperanzas. Creen que la patronal seguirá sin dar el brazo a torcer. Es por ello que preparan un calendario de movilizaciones. Primero concienciarán a los trabajadores del sector sobre la importancia de participar en las mismas. Como último paso se organizaría una huelga sectorial, según CC OO. Ortells asegura que la llevará a término «antes de que finalice la prórroga» -31 de diciembre de 2016-.
Cabe recordar que Ascer y sindicatos también protagonizaron unas negociaciones tensas en el último convenio. Ambos lograron un acuerdo después de que CCOO y UGT amenazaran con la huelga general. El sector no se podía permitir entonces esta protesta y llegaron a un consenso. Hoy retoman el diálogo.
