El debate sobre la Memoria Histórica volvió a protagonizar ayer la actualidad municipal en la Vall d'Uixó, en esta ocasión en el pleno ordinario, en el que se presentaron hasta dos mociones que plantearon la eliminación de los símbolos del franquismo no solo de edificios públicos, sino también de algunos privados. El resultado de la votación fue dispar, dado que el equipo de gobierno sacó adelante la que se presentó conjuntamente, mientras que fue rechazada la presentada por EU en solitario, en la que se solicitaba que se incluyera entre esos elementos a eliminar la Cruz de los Caídos.
La discusión fue larga y acaparó buena parte del plenario. Todos los grupos municipales repitieron las razones que se habían estado esgrimiendo los últimos días, desde que la Conselleria de Educación decidiera retirar el escudo franquista de la fachada del IES Botànic Cavanilles para dar cumplimiento a la Ley de Memoria Histórica. Si desde el equipo de gobierno y Ara es Pot se defendía precisamente la necesidad de hacer cumplir las leyes, desde el Partido Popular se pidió que no se retiraran esos símbolos por «contar una parte de la historia de nuestro pueblo». De hecho, uno de los momentos de más crispación llegó cuando el portavoz del PP, Óscar Clavell, afirmó que el equipo de gobierno demostraba «un desconocimiento absoluto de la historia», por lo que fue increpado por personas del público, obligándole incluso a interrumpir su explicación.
Entre los puntos de acuerdo de la moción llama la atención la decisión de incluir la propuesta de retirar los nombres de las calles y plazas concedidos a cinco alcaldes de la dictadura. Desde el PP se criticó esta medida por considerar que estas personas, en su cargo público «independientemente de su ideología, hicieron lo mejor que pudieron por su pueblo». En concreto, Óscar Clavell hizo referencia a Eleuterio Abad, asegurando que «gracias a su gestión como alcalde se abrió la cueva de San José». En contrapunto, desde el equipo de gobierno se defendió que dando cumplimiento a la Ley de Memoria Histórica «se cierran heridas abiertas y se da satisfacción a las personas que fueron presas, exiliadas y en el peor de los casos asesinadas», afirmando que con la aprobación de la moción «se repara el daño infligido a las víctimas».
Bajada «contenida» del IBI
El portavoz popular, Óscar Clavell, no dudó en acusar al equipo de gobierno de presentar esta moción para «tratar de desviar la atención sobre otros temas», como por ejemplo la modificación del IBI, que fue aprobada con un incremento del coeficiente municipal, que se sitúa en el 0.86. Según defendió ayer el concejal de Hacienda, Javier Ferreres, a pesar de aumentar el tipo impositivo, al aplicarse una rebaja del valor catastral de las viviendas, en concreto de la base imponible, en un 30 % «se consigue que rebaje el IBI de 20.326 recibos». El PP criticó el incumplimiento electoral del equipo de gobierno ya que el PSPV prometió que bajaría el tipo impositivo al 0.60.
