La Generalitat suspende finalmente el Tram metropolitano de la Plana por no llegar a tiempo a la convocatoria de ayudas europeas. Sin la financiación de los fondos Feder, el Consell descarta esta obra por adolecer de presupuesto para impulsar una conexión que cuesta 89 millones de euros.
La consellera de Obras Públicas, María José Salvador, confirmó ayer en Castelló que carece de margen para conseguir el dinero de la UE, y responsabilizó al anterior Consell del PP por obviar un plan de movilidad comarcal, una condición que exige la UE para conceder la subvención. Las obras del Tram tendrían que estar acabadas en 2018 para lograr la inversión europea, es decir, no hay tiempo material.
Con los fondos Feder, el Consell pretendía pagar la mitad de los 57 millones de un primer trazado entre Castelló y Almassora. El gobierno popular realizó los pliegos de condiciones de los tramos de Castelló a Vila-real, pero según Salvador, se olvidó de redactar el preceptivo plan de movilidad comarcal. Asimismo, el dinero europeo solo abarcaba el tramo entre la capital de la Plana y Almassora por la antigua N 340. Hasta Vila-real el presupuesto ascendía hasta los 89 millones de euros. Salvador subrayó que la Generalitat apuesta por mejorar el transporte interurbano y destacó que buscará una alternativa para el área metropolitana.
El Tram de la Plana fue anunciado en 2004 por primera vez. Luego se paralizó por la crisis económica. Los nuevos inquilinos de la Generalitat lo dejan de lado y estudiarán otras opciones más viables y económicas, sin descartarse ninguna opción. Pero se adivina más que improbable que active un trolebús con catenaria tras el importante desembolso que supuso la línea 1 (85 millones de euros).
La consellera admitió la falta de inversiones para obra de nueva planta en el presupuesto autonómica de 2016, y lamentó que los pagos pendientes de obras acabadas heredadas de pasadas legistaturas acapararán las cuentas del próximo año. Por ejemplo, están pendientes once millones de las obras de la línea 1 del Tram, que fue inaugurada hace casi un año.
Esta deuda recibida condicionará las inversiones de toda la legislatura y dificultan que se pueda retomar en este mandato el transporte metropolitano. Además, añadió Salvador, el Consell ha de solventar las concesiones del autobús interurbano, que se mantienen prorrogadas desde hace años.
Estación intermodal
La consellera de Obras Públicas eludió mojarse con la pugna que dirimen Castelló y Vila-real con la estación intermodal y reiteró que la ubicación final será una decisión «técnica y no política». Salvador subrayó que, tal como acordó en 2014 el Ministerio de Fomento con el Consell, hay que convocar primero una comisión y realizar un informe técnico para dilucidar el emplazamiento de la estación intermodal. La mesa se constituirá, dijo, tras las elecciones del 20D.
