Los vecinos de la asociación del Segon Molí han celebrado un año más unas jornadas de convivencia con el objetivo de retomar el pulso a un año cargado de novedades a nivel municipal y seguir desarrollando las actividades de un colectivo con muchos retos por delante.

La celebración se ha realizado en uno de los puntos más queridos por la entidad como es el huerto urbano que comparte con la asociación del primer Molí, zona verde que ha sido todo un éxito y que ha permitido dar más vida si cabe a un barrio eminentemente residencial. Todas las parcelas tienen ya su adjudicación a vecinos de las dos asociaciones, con el añadido además de una amplia lista de espera que refleja el interés que ha habido en el barrio.

El Segon Molí cuenta en la actualidad con unos 4.000 residentes que están representados por la asociación pese a que, como ha lamentado en más de una ocasión Agulleiro, son muchas las familias que siguen sin dar el paso para hacerse socios.

Miembros de la entidad se han reunido en estas jornadas de convivencia para tratar tanto las fórmulas de acercamiento a la vecindad como para seguir insistiendo en las mejoras del barrio ante la nueva corporación municipal que surgió de las urnas el pasado mes de mayo. Más zonas verdes en las calles del barrio y la limpieza de los numerosos solares que existen son algunos de los aspectos a plantear al ayuntamiento. Además, otra de las batallas es poder disponer de un local en condiciones para las reuniones y actividades de Segon Molí, algo por lo que batallan desde hace ya bastantes años.