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Comercios planean acciones legales para frenar la nueva superficie

Establecimientos del centro de la ciudad convocan una primera reunión para analizar el proyecto El ayuntamiento tiene escaso margen de actuar con el PGOU ya que el viejo planeamiento también preveía usos comerciales en la parcela escogida

Comercios planean acciones legales para frenar la nueva superficie

Comercios del centro de Castelló se movilizan contra el nuevo centro comercial anunciado junto a la Ciudad del Transporte, y planean presentar acciones legales para frenar el proyecto. Esgrimen que hay insuficiente demanda que lo justifique y advierten que causará un impacto «mortal» en el tejido comercial del casco urbano.

Una cincuentena de pequeños comerciantes de Castelló mantuvieron ayer una reunión para abordar la propuesta de gran superficie. Los presentes mostraron su «gran malestar» con esta actuación y advirtieron que promoverán todas las medidas que estén en su mano para paralizarlo. Son conscientes de que la normativa actual prioriza la libre competencia, pero recuerdan que su apertura necesita la concesión de una licencia de actividad por parte la Generalitat. Para ello, sostienen que deberá presentar un informe que demuestre su viabilidad, señaló la secretaria general en Castelló de la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunitat (Covaco), Teresa Esteve.

La representante de Covaco explicó que primero reclamarán información sobre el proyecto en cuestión y, luego, analizarán medidas a emprender« dentro de la ley» para tirar atrás el centro comercial. Hoy, representantes del comercio del centro de la capital se reunirán con la concejala de Promoción Económica, Patricia Puerta. El sector comercial resalta que Estepark no generará más consumo y alerta que su oferta causará una saturación de superficies comerciales. «Son mas metros para repartir entre la misma gente», lamentó Esteve.

No obstante, subrayó que Estepark es por ahora un anuncio y que el ayuntamiento ni el Consell han recibido información sobre el centro comercial. Desde el ayuntamiento insistieron ayer en que de momento disponen de un plan de urbanización de la citada superficie de 165.000 metros cuadrados situada al lado de la antigua N340. El impulsor de estas obras ha publicitado la ejecución del proyecto comercial y ha avanzado su intención de inaugurarlo en 2017, pero tiene pendiente presentar el proyecto al Consell, que ha de aprobar la licencia de apertura. Ha habilitado una valla con el nombre del futuro complejo y ha trascendido que quiere acoger tiendas que actualmente se encuentran diseminadas por la Ciudad del Transporte.

Suelo terciario en 1984

El consistorio se ha sumado a la inquietud del pequeño comercio y busca algún resquicio legal a través de la anulación del último Plan general de Ordenación Urbana para paralizar el centro. El ejecutivo local sabe que las opciones son muy escasas porque la normativa prioriza la libre competencia y el impacto medioambiental de la ubicación escogida es nulo. Una posibilidad pasa por el PGOU de 1984, que es el vigente al estar invalidado el planeamiento de 2000. Una clasificación de la pastilla de no urbanizable en 1984 podría afectar al proyecto. El ayuntamiento ha solicitado un informe técnico al respecto, pero fuentes municipales avanzaron que en 1984 ya tenía una calificación de industrial que permitía las dotaciones comerciales.

Esta propuesta amenaza la política a favor el pequeño comercio del nuevo ayuntamiento. Los establecimientos del centro afirman que provocará «una despoblación del centro de la ciudad». La cuestión es que, a diferencia de los años precedentes, el viento parece que no sopla a favor de las grandes superficies del extrarradio. Los comercios ya han dicho que no se quedarán quietos.

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