El equipo de gobierno de Castelló retrasa la aprobación de los presupuestos de 2016 por los últimos cambios pactados con Castelló en Moviment. Su idea inicial era llevarlo al Consell de Govern municipal de hoy y entregarlo a los grupos de la oposición para que presentaran alegaciones, pero finalmente no ha habido tiempo material para ello. Está pendiente la redacción de un informe del interventor general que ha de incluir las revisiones realizadas, según fuentes municipales.

El ejecutivo local aspira a aprobar las cuentas a primeros de diciembre para que puedan entrar en vigor en enero. Pero esta demora deja en el aire esta previsión. Desde el equipo de gobierno señalaron que el Consell de Govern tratará el presupuesto cuando finalice el interventor su informe. No supieron precisar si será la próxima semana o más adelante, y apuntaron que no se descarta que se apruebe en el pleno ordinario de finales de diciembre. Esta dilación haría que el presupuesto empezara a aplicarse en febrero o marzo, una circunstancia que era habitual hasta que se activó un plan de ajuste hace tres años.

El ejecutivo ha tenido menos tiempo de lo normal para elaborar los presupuestos. Primero, porque asumió la alcaldía a mitad de año, y en segundo lugar, ha tenido que encarar un proceso de negociaciones con Castelló en Moviment. Las cuentas se situarán en torno a los 160 millones y se consideran de «transición».