Las fiestas de la Magdalena necesitan renovarse. Así lo considera el presidente de la Gaiata 11, Luis Sánchez, cuya principal petición a la nueva Junta de Festes es que «actualice las fiestas de Castelló». A su juicio, «se han estancado» y deberían modernizarse «sin perder su carácter tradicional». Además, cree que es necesario «visibilizar» la semana grande, promocionarla aún más.
Este deseo de modernizar las fiestas no extraña viniendo de un cau gaiater que siempre ha destacado por la innovación en sus monumentos, con formas y diseños alejados de las figuras festeras habituales. Este año, prometen sorprender, como de costumbre, con «una gaiata bastante moderna». Eso sí, el presidente de la entidad, reconoce que van un poco atrasados en la construcción de los monumentos. «El diseño de la gaiata infantil va bien, pero el de la mayor está aún en proyecto».
De momento, han concentrado sus esfuerzos en la gala de presentación que celebrarán esta noche en el Palau de la Festa, donde ofrecerán un espectáculo del que ni siquiera el presidente conoce los detalles. «Es una sorpresa», subraya.
Quizá el carácter moderno del cau gaiater del Forn del Pla se explique por la juventud de sus miembros. La presencia de jóvenes en esta comisión es significativa, por lo que la media de edad ronda los 27 años. De hecho, buena parte del programa festero se dirige fundamentalmente a los más jóvenes y Cristina Salvador es la encargada de organizarlo.
También es destacable la participación de los comerciantes en la actividad de la entidad. «Al ser un barrio antiguo -en torno a la calle San Roque- los dueños de los negocios, por tradición, nos ayudan mucho», explica Sánchez. «Nos ponen publicidad en el librito y nos facilitan regalos para las rifas que organizamos, así podemos obtener fondos para organizar los actos», dicen con orgullo el presidente, quien agradece el trabajo de todos los miembros de la comisión y de los comerciantes. «Toda pequeña ayuda es un mundo», concluye.
Unas 80 personas integran la comisión, que cuenta con la colaboración de otros 25 socios de la calle. Entre todos hacen posible la organización de numerosos actos que se concentran durante las fiestas de la Magdalena. El primer sábado de la semana grande suele celebrarse un concierto y la música acompaña a los festeros durante el resto de noches con una discomóvil. El viernes es el día dedicado a los niños: castillos hinchables y juegos en grupo entretienen a los más pequeños, de manera que las familias pueden disfrutar juntas de las fiestas. El último sábado se reserva para el tradicional sopar de pa i porta, en el que participan todos los vecinos de la zona, y como colofón la actuación de una orquesta pone el broce final a la semana festera.
