Los operarios que han trabajado durante un mes en el desbroce y retirada de enseres del Barranquet de Almassora iniciaron ayer el traslado de los restos al vertedero. En total, la localidad ha recogido la maleza y desperdicios acumulados durante meses en 12.000 metros cuadrados del cauce. La limpieza evitará que se produzcan inundaciones en caso de fuertes lluvias, además de ofrecer una imagen mejor del entorno que beneficia a los vecinos de la zona.

Los trabajos realizados, según fuentes municipales, han incluido la limpieza de aproximadamente 4.000 metros cuadrados dentro del barranco, coincidiendo con el final de la calle San Esteban, y otros 8.000 metros cuadrados dentro de la zona que corresponde al grupo Fátima. En ambos casos las labores se han centrado en el desbroce, la retirada de enseres, plásticos, papeles y restos de poda que hoy se trasladarán al vertedero en más de 10 viajes en camionetas.

Entre otros operarios, cuatro beneficiarios del plan de empleo agrícola han trabajado durante una semana con maquinaria ligera para mejorar el resultado de la limpieza. Han contado con cuatro desbrozadoras, azadas, hoces y capazos, a los que se ha sumado durante 15 días la maquinaria pesada para las labores de más envergadura: máquina con brazo desbrozador para los márgenes del barranco, una máquina con pala para desbroce y allanamiento de la zona y el camión del Servicio Municipal de Mantenimiento y Logística (SMML) para carga.

El Servicio de Inspección de Salubridad ha vigilado los trabajos para prevenir los efectos de una posible gota fría en el tramo que divide los términos municipales de Castelló y Almassora. Además, ha trabajado también en la poda de las jacarandas y el resto de árboles del cauce entre los grupos Fátima y Corell para mejorar la imagen de este entorno natural ubicado entre ambas localidades. La intención de Servicios Públicos y Urbanismo es repetir esta operación periódicamente para evitar que se acumule la maleza, señalan desde el ayuntamiento.