Alrededor de 1500 feligreses se dieron cita ayer en Segorbe en la celebración de la apertura de la Puerta Santa de la Catedral para dar la bienvenida al año santo jubileo de la Misericordia. Un acto inédito y multitudinario que fue presidido por el obispo de la diócesis de Segorbe Castelló, Casimiro López Lorente, ante la atenta mirada de más de un millar de feligreses venidos en autobuses desde varios puntos de la provincia de Castelló.

Acompañado de más de 120 sacerdotes de toda la provincia, el Obispo realizó este acto cargado de simbolismo abriendo la puerta que va del Claustro hasta la nave de la propia Catedral. Desde ayer hasta noviembre del 2016 los que pasen por la puerta impetrando la Misericordia de Dios, la obtendrán pidiendo perdón de sus faltas y pecados.

Para la ocasión, se ha colocado sobre la puerta un cartel conmemorativo con la inscripción «Puerta Santa 2016. Año de la Misericordia» y se ha instalado en una urna de metacrilato, con una obra del italiano Antoniazzo Romano, del rostro de Cristo, uno de los tesoros del Museo Catedralicio segorbino, ya que se cuenta entre las tres únicas copias autorizadas de la imagen de San Juan de Letrán de Roma en el siglo XV.

La comitiva eucarística salió a las 12.00 horas de la iglesia del Seminario para, en procesión, ir hasta la Catedral y realizar el acto simbólico de apertura de puerta del jubileo. Tras la bendición, López, acompañado de los sacerdotes, celebró la santa misa donde en su sermón resaltó que: «con este gesto, fuertemente simbólico hemos iniciado este año santo. Dios nos quiere hacer partícipes de su Misericordia y, con verdadero gozo, hemos abierto y pasado la Puerta Santa de la misericordia, signo del mismo Cristo», matizó el prelado quien argumentó que: «entrar por la puerta significa entrar en la misericordia de Dios y descubrir la profundidad de su amor». El obispo animó a los fieles a que cada «vez que atraviesen la Puerta Santa se sientan partícipes del misterio de amor a Dios» y a que vivan el año santo siguiendo los consejos del Papa Francisco que invita a vivirlo como un camino de peregrinación de nuestras vidas. «Para llegar a la Puerta Santa cada uno de nosotros debemos realizar una peregrinación y caminar hacia la misericordia de Dios a través de nuestro compromiso y nuestro sacrificio», destacó en su sermón López Lorente quien resaltó que: «atravesando la puerta nos dejaremos abrazar por Dios para ser misericordioso con nosotros y con los demás».