El grupo municipal del Partido Popular en Borriana ha decidido apearse de la denuncia presentada hace cerca de medio año por las nuevas asignaciones, sueldos y comisiones de los concejales del ayuntamiento del que forman parte. Inicialmente, fueron los tres grupos de la oposición, Partido Popular, Cibur y Ciudadanos los que decidieron llevar ante las justicia los sueldos de los diferentes representantes municipales. Ahora, el Partido Popular decide separar la política de los entresijos judiciales y abandona la denuncia.

El portavoz del Partido Popular en Borriana, Juan Fuster comentó a este periódico que la decisión «ha sido tomada después de discutir y comentar en una reunión de grupo la viabilidad del contencioso. Además también hablamos con los técnicos encargados y nos aconsejaron no judicializar la situación». Fuster también hizo referencia a lo que según él «es una situación injusta en un principio, pero incluso hablando con la secretaria vimos que el recurso no iba a salir adelante, así que creo que hemos tomado la mejor decisión. Las situaciones políticas no siempre se pueden resolver por vía judicial y, por tanto, intentaremos no crear polémica, sino sumar».

La polémica se inició a finales del mes de junio, concretamente en el pleno extraordinario celebrado en el consistorio borrianense el día 29 . Durante el debate sobre la asignación de sueldos y la creación de nuevas comisiones de trabajo, los tres partidos de la oposición vertieron duras críticas sobre las nuevas propuestas de pago. PP, Cibur y Ciudadanos presentaron de forma conjunta una enmienda que criticaba que «se quieran establecer hasta cuatro comisiones de trabajo, cuando creemos que con dos sería suficiente, y por tanto se ahorraría en gasto público y pagos a los concejales». La asistencia de los miembros de cada comisión y las retribuciones que deben percibir por cada una de ellas también levantó polémica. De nuevo en una enmienda conjunta, se proponía que «los vocales y presidentes de las comisiones tuvieran las mismas remuneraciones». Por último en el mismo pleno extraordinario se aprobaban los sueldos de los concejales. Y, de nuevo, los tres partidos de la oposición mostraban su descontento. Fuster manifestaba que «es un simple reparto y no tendrá nada que ver con la carga de trabajo de cada concejal, puesto que los sueldos son los mismos para gente con cargas de trabajo muy diferentes». Desde Ciudadanos, Sanchís indicó que los «sueldos son un reparto y no han respetado lo dicho en la campaña electoral». Incluso desde Cibur se recordó al representante de Se Puede que «incumplía sus promesas porque su sueldo superaría el triple del salario mínimo».

Con la decisión del partido popular de abandonar la vía contenciosa para intentar revertir la situación de los sueldos, parece que el equipo de gobierno de Borriana es quien sale reforzado de la situación, ya que el PP es el partido de la oposición con mayor representación en el consistorio, mientras los tres concejales que suman Cibur y Ciudadanos no parecen suficientes para continuar con la fuerza necesaria para que la vía judicial obligue al equipo de gobierno a volver a confeccionar los pagos a los concejales.

Desde Cibur no quisieron hacer declaraciones sobre la decisión de los populares, y se limitaron a manifestar que «entendemos que una vez iniciada la vía judicial, debería esperar a las resoluciones por parte del juzgado».