El UBE L'Illa-Grau y el CV Mediterráneo han cerrado una primera vuelta en la Superliga bastante irregular. Los dos equipos pelean por eludir el descenso de categoría tras la disputa de las once primeras jornadas del campeonato doméstico, pero confían en mejorar su situación en la segunda vuelta del campeonato y acabar consiguiendo el objetivo de la permanencia.

En el caso del equipo que dirige Carlos Cavalli, las lesiones están condicionando su rendimiento en estos primeros meses: Mauricio Viller arrastra molestias en el hombro, Augusto Colito y Tomás Agost se recuperan de sendas lesiones en un dedo de la mano, Álvaro Villalba, Carlos Andreu y Álex Blasco también presentan problemas musculares.

«El equipo empezó con el pie izquierdo. La llegada de los fichajes se retrasó y no hubo tiempo de ensamblar bien el plantel. Eran muchos jugadores nuevos, con todo lo que ello comporta, pero es que, además, las lesiones no nos han respetado», analiza el preparador italo-argentino, quien no duda en añadir que «nos cuesta entrenar porque muchos de mis jugadores están en recuperación todo el tiempo y no puedo contar con ellos, y así es más difícil preparar los partidos».

No obstante, el técnico del equipo grauero sabe que las lesiones afectan a todas las plantillas de la Superliga, pero en su caso es más determinante ya que «tenemos un plantel muy corto y las ausencias nos condicionan cada encuentro».

En el CV Mediterráneo, su presidente-entrenador-jugador Santi López cree que a su equipo le queda mucho que mejorar pero se ven «donde esperábamos». «La competición es complicada y nosotros somos los novatos. Conocíamos por vídeo a los rivales pero eso no tiene nada que ver a cuando te enfrentas a ellos», explica.

López, además, cree que su plantilla ha ganado más experiencia en esta primera vuelta y, pese a tener un presupuesto de Superliga 2, «en general estamos contentos con los puntos que hemos sacado. Estamos muy cerca del octavo y noveno, y sabemos que una victoria puede cambiar mucho la clasificación».

Este fin de semana, los dos clubes castellonenses disputarán el primer partido de la primera vuelta y último de 2015 y, tras él, dispondrán de aproximadamente un mes para recuperarse ya que la competición se retomará a mediados de enero. Un parón que, sin lugar a dudas, sentará muy bien a ambos. «En la segunda vuelta vamos a estar mejor. Tenemos ahora un mes muy bueno para recuperarnos. El equipo que tenemos no es para estar abajo sino para estar más arriba y, como llevaremos más entrenamientos, va a ir a mejor, estoy seguro», concluye el entrenador italo-argentino.

«Nos espera una segunda vuelta muy emocionante y espero que los dos consigamos la permanencia», desea López.