La Conselleria de Educación ha desestimado la rehabilitación integral del antiguo Colegio Universitario de Castelló (CUC), donde se ubica el colegio Vicent Marçà, por motivos técnicos. Su intención ahora es construir un nuevo centro y, para ello, necesita terrenos que no estarán disponibles hasta que se apruebe el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), previsto en 2017. Así se lo han trasladado esta semana a la AMPA del centro escolar, que se resiste a cambiar de ubicación y plantea dudas sobre la viabilidad del proyecto.
La problemática en torno a este colegio viene de lejos. Durante años los vecinos del Raval Universitari han reclamado a la administración autonómica la creación de un nuevo centro, ante la saturación del Manel Garcia Grau. Como solución provisional se acordó trasladar a parte de los alumnos al CUC, que ha funcionado como aulario durante los últimos cinco años. Antes de las pasadas elecciones autonómicas y municipales, el Ayuntamiento de Castelló y la Generalitat, gobernados por el PP, autorizaron convertir este aulario en el nuevo CEIP Vicent Marçà. Sin embargo, para que el centro escolar pudiera permanecer en esta ubicación era necesaria una rehabilitación integral del edificio que nunca llegó.
«El gobierno del PP dejó un regalo envenenado aprobando la creación del colegio en unas instalaciones absolutamente deficientes donde no había hecho ningún tipo de intervención», explicaron ayer a este diario fuentes de la Conselleria de Educación. «Desde el primer día, tanto la conselleria como el Ayuntamiento de Castelló están trabajando para acondicionar el antiguo CUC y adecentarlo para acoger el colegio», señalaron. No obstante, indicaron que en las próximas semanas el departamento dirigido por Vicent Marzà presentará el mapa de prioridades en infraestructuras, «donde figurará la necesidad de construcción del colegio en el lugar que le corresponda según el baremo que se publicará», indicaron las mismas fuentes.
Desde la AMPA del CEIP Vicent Marçà lamentaron ayer que «la conselleria apueste de una manera más clara por la construcción de un nuevo colegio que por dejar este centro educativo en el edificio que actualmente ocupa y proceder a una rehabilitación integral del mismo». Esta misma semana, tras una reunión entre el consistorio y la conselleria, han informado a los padres de que la remodelación del CUC no es viable según un informe técnico. La vicepresidenta de la asociación, Estíbaliz Lecertúa, criticó en este sentido que la conselleria no les haya concretado qué problemas técnicos impiden la rehabilitación.
La opción que se baraja es construir un nuevo centro, pero el problema son los terrenos. «Es imposible encontrarlos dentros del barrio, ya que el anterior equipo de gobierno del ayuntamiento no hizo la reserva de suelo dotacional educativo necesaria», detallaron desde la AMPA. El ayuntamiento tendrá que buscar ubicación al otro lado del río Seco, pero no podrá disponer de terrenos hasta que se apruebe el PGOU, cuya paralización plantea a los padres «muchas dudas sobre la rapidez» de la actuación. Por ello, las familias rechazan el proyecto y piden que se reforme el centro, al considerar que sería la solución más rápida.
