Vinaròs ha sido otro de los municipios de la provincia de Castelló que ha solicitado ya su adhesión a los acuerdos de colaboración entre la Generalitat Valenciana, a través de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio; y las empresas suministradoras de energía como son Endesa, Gas Natural e Iberdrola para poder garantizar con ello el suministro de energía y agua a las familias de la localidad que se encuentren en situación de vulnerabilidad económica.
Este plan contra la pobreza energética al que se ha adherido el ayuntamiento vinarocense contempla solicitar a las empresas eléctricas la reversión de los 3.600 millones de euros que recibieron en concepto de subvenciones por parte del Estado para que se destinen al pago de ayudas a familias que sufren en sus viviendas la pobreza energética.
La gestión de estas ayudas se realizaría desde los propios consistorios, con el objetivo de devolver a los municipios un peso específico en las políticas de ámbito social.
El alcalde de Vinaròs, Enric Pla, explicó al respecto que «este tipo de medidas queda claramente enmarcado en nuestro objetivo de priorizar las necesidades básicas ante la situación de emergencia social en la que se encuentran muchas familias de nuestra localidad».
El alcalde del municipio destacó además que «seguimos trabajando fundamentalmente en este ámbito, como es de las viviendas sociales».
