El acceso a las prestaciones para la dependencia es uno de los principales retos a los que se enfrenta el Consell, que ha heredado del anterior ejecutivo autonómico una abultada lista de espera. En la provincia de Castelló hay 4.851 personas que han solicitado las ayudas y que aguardan la resolución de su expediente -en el conjunto de la Comunitat Valenciana la cifra asciende a los 44.790 solicitantes-.

Esto significa que hay casi tantos dependientes dentro del sistema de ayudas como fuera o, lo que es lo mismo, la mitad de los dependientes siguen sin poder acceder a las prestaciones en Castelló. En la actualidad 4.994 personas reciben ayudas en la provincia -sólo 143 más de las que están en lista de espera-. De ellas, 2.487 perciben prestaciones económicas, 2.481 son beneficiarias de algún servicio o recurso asistencial, y 26 hacen uso de servicios para la promoción de la autonomía personal.

Tasa de reposición

No obstante, en los últimos meses se han registrado algunos avances en materia de dependencia. La Conselleria de Igualdad y Políticas inclusivas ha logrado superar por primera vez la tasa de reposición de personas fallecidas. Es decir, ha conseguido, no sólo incorporar al sistema a dependientes que cubren las bajas por defunción, sino que además ha incorporado a nuevos beneficiarios.

Según los últimos datos facilitados por la conselleria, en la provincia de Castelló «se han resuelto un total de 538 expedientes, de los cuales 306 cubren la tasa de reposición de fallecidos, mientras que el resto, 232, son incorporaciones netas».

El cambio de tendencia se debe al impulso presupuestario del Consell que en los últimos meses ha destinado 28,5 millones de euros más para ampliar el número de personas atendidas, que en la Comunitat Valenciana asciende a 43.926, según el departamento que dirige la vicepresidenta, Mònica Oltra.

Piden premura

Desde el colectivo de personas dependientes de Castelló demandan agilidad en la puesta en marcha de medidas que mejoren la situación del sector. Alaban «las buenas ideas del Consell», pero lamentan que «aún no se notan». Entre las mejoras que esperan como agua de mayo está la retirada del copago en centros de día y ocupacionales, prevista a partir del próximo 1 de enero. Además, piden que se aplique la medida también a las residencias de mayores y personas discapacitadas, para las que de momento sólo se contempla un aumento en las ayudas de gastos personales, el denominado dinero de bolsillo.