Una de las rutas que los vecinos de Benicàssim hacen, por lo menos, una vez al año, es la subida a la Ermita de Santa Águeda.

La romería a a la ermita de la patrona del municipio se celebra el primer domingo de febrero y con este ascenso, la localidad conmemora la recepción de la Carta Pobla por los benicenses en 1603.

Esa fecha está marcada por muchos de los vecinos del municipio que no faltan a la tradicional cita. El recorrido es de aproximadamente 4 kilómetros de distancia y el recorrido es apto para todas las edades.

Quien quiera prepararse para la romería durante las fiestas navideñas y realizar antes el ascenso a la ermita, que anote el siguiente recorrido.

Como punto de partida tomaremos la fuente del Señor, junto a la iglesia Santo Tomás y de ahí cogeremos la calle Santo Tomás y ascenderemos la calle Santa Águeda en dirección al cementerio. Por el camino puedes hacer una parada y contemplar la ofrenda a San Antoni Abad, patrón de la localidad cuya festividad es el 17 de enero.

El trayecto continúa por debajo del puente hacia el cementerio y, al llegar hay que girar a la izquierda. Durante el recorrido se pasará por dos puentes más y se sigue recto como si se fuera al Ecoparque. Tras unos metros recorridos se girará a la izquierda y empieza un poco de cuesta. El trayecto continúa en línea recta dejando a los lados varios campos de naranjos y el camino comienza a ser de tierra.

Tras unos minutos comienza un ascenso más acusado que lleva directo a la ermita.

Encontrar novio al pasar la cueva

Una vez llegado al lugar y contemplar el edificio, se recomienda que las mujeres que realicen el ascenso caminen un poco más hasta la coveta de Sant Antoni.

Y es que tal y como cuentan los vecinos del municipio, las mujeres que pasen tres veces por la cueva encontrarán marido. En la zona de la cueva hay dos inscripciones, escritas en valenciano; en la primera pone «si eres soltera y buscas novio o marido, entra y cruza la cueva porque dice una leyenda que al año de que la cruces, verás el deseo cumplido». En la segunda pone que «la viuda de buen ver que quiera cambiar de estado (se entiende que civil), con un hombre guapo y joven , entre en la famosa cueva y al pasar cuatro o cinco veces, pronto tendrá lo anhelado».

De todas formas, si se sigue con la tradición y no se consigue pareja en el plazo de un año, por lo menos los visitantes habrán disfrutado de un buen paseo de aproximadamente dos horas, contando la subida y bajada. La vuelta al casco urbano se realizará siguiendo el mismo recorrido realizado.