Gonzalo Galán puso fin a su centenaria trayectoria en el conjunto peñiscolano de forma brillante, con un doblete en el derbi autonómico para allanar el camino de los castellonenses hacia un nuevo triunfo. El jugador tiene una oferta de otro equipo y busca los minutos que no tiene en la actualidad en el Peñíscola FS.

El nombre de Gonzalo Galán Carsí quedará, por siempre, escrito en letras de oro en los anales históricos del Peñíscola RehabMedic. Hombre de club, profesional, educado, familiar, sencillo, discreto y trabajador, el valenciano se ha ganado con sus hechos a toda la parroquia castellonense.

Benicarlando de adopción, el 18 azulón recaló en las filas de la entidad que preside Juan Vizcarro en verano de 2012. Procedente de Melilla, tras la desaparición del Benicarló FS. Gonzalo Galán se puso al servicio de un nuevo proyecto deportivo que pretendía, por aquel entonces, devolver el fútbol sala de élite a la comarca del Baix Maestrat. Tan solo un año más tarde, aquel sueño había pasado de ser utopía a realidad.

Protagonista de la etapa más gloriosa del club del Baix Maestrat, con el subcampeonato de Segunda División y posterior ascenso a Primera, el valenciano volvió a saborear, meses después, la dulce miel de los play-off al título de la LNFS, un hito histórico que iluminó la pequeña ciudad costera del Mediterráneo para situarla entre el más destacado panorama nacional. El jugador ha sido internacional con España y un fijo de la selección valenciana, en las categorías inferiores.