Un grupo de vecinos de Castelló afectado por la reducción de plazas gratuitas de las zonas verde la ORA ha iniciado una recogida de firmas contra esta medida. El gobierno municipal sostiene que el ejecutivo del PP concedió el doble de tarjetas que las que preveía la concesión y que este exceso supone 160.000 euros al año al erario municipal.

Con la revisión, que se aplicará el 31 de enero, tendrán derecho a estacionamientos gratuitos en zonas verdes los residentes en estos viales y los de la zona azul. Quedan fuera, por ejemplo, los vecinos de las calles peatonales del casco antiguo o de los entornos donde se encuentran las ubicaciones verdes (colegio Herrero, Hacienda, IES Ribalta, plaza País Valencià-ronda Mijares y Muralla Liberal).

Esta modificación ha generado malestar entre los vecinos afectados de los alrededores de las citadas cinco zonas. A través de la web de change.org han impulsado una recogida de firmas en la que piden al ayuntamiento que mantenga las condiciones anteriores. «Después de los trastornos ocasionados a vecinos y comerciantes con la implantación de más parquímetros por parte de la anterior corporación, el actual gobierno municipal pretende aumentar la recaudación a costa de eliminar tarjetas de residentes y comerciantes para que estos tengan que pagar el estacionamiento en la vía pública», sostiene en un escrito los impulsores de la iniciativa. «Así se hace flaco favor a la defensa de los más necesitados, ya que a quien más perjudica es a la gente trabajadora que no posee aparcamiento privado», añade.

PSPV y Compromís se opusieron en el anterior mandato a la ampliación de la ORA, que consiste en plazas verdes, al afectar a calles sin comercio. Ahora, los residentes y comercios de viales peatonales se quedan sin alternativa gratuita para aparcar. El ejecutivo se defiende en que está condicionado por la concesión que aprobó el gobierno popular. La adjudicación se aprobó en 2014 y tiene un periodo de vigencia de ocho años. En este contexto, el consistorio afirma que se repartieron más de 5.000 tarjetas en zonas verdes frente a las 2.500 previstas. Las zonas verdes comprenden 519 plazas de aparcamiento, con lo que el ejecutivo entiende que con 5.000 tarjetas desaparece la rotación, que es el objetivo de la ORA.

Pero los vecinos que se han quedado sin autorización de la ORA no entienden de trifulcas políticas y consideran que el gobierno municipal debería mantenerles la gratuidad hasta que cambie la actual adjudicación, que finaliza en 2022.