«Adrian nos pone vídeos de la selección que ganó el oro en el 92 y se nos queda la piel de gallina. Hay gente que nos identifica con ese grupo, que trabajó más de lo habitual para poder ganar», resalta Comerma. «Es lo que pasa ahora con los equipos femeninos de balonmano, waterpolo o fútbol... Las chicas ganan y tienen repercusión. A nosotras nos falta dar ese paso de comenzar a estar entre los cuatro mejores de cada competición. Si lo hacemos, la gente nos seguirá», afirma la jugadora.

p. v. valencia