La XVII edición de «La volta a peu a les ermites de Borriana», organizada por la comisión fallera de Don Bosco y los tradicionales rollos de San Blas, abren la programación festiva que esta ciudad celebra en honor a su patrón. Unas fiestas que en esta población se han considerado mayoritariamente culturales y en las que recitar versos del Besso en la fiesta de la «Font del vi», las conferencias agrícolas y agroalimentarias, las exposiciones, las obras de teatro de distintas comisiones falleras, la «I trobada de bolilleres» y los actos religiosos configuran un programa con escasas novedades por parte del nuevo equipo de la corporación municipal.
Estas fiestas concentran una multitud de burrianenses alrededor de la ermita del patrón San Blas, una buena oportunidad para ver la imagen que ofrece el exterior de la ermita del patrón a todos los visitantes.
Hace unos años se derribó el antiguo hospital, el cual estaba pegado a la ermita dejando un solar, que actualmente se utiliza como zona de estacionamiento, sin que para ello se haya realizado inversión alguna.
Dicho derribo ha dejado al descubierto las paredes medianeras de las casas que coincidían con el hospital, están estas paredes sin lucir y sin pintar y tienen distintas configuraciones; con estas paredes posteriores a un derribo se configura el contorno de la plaza que se ha creado tras el derribo del antiguo hospital. Al lado mismo de la ermita del patrón de la ciudad.
La ermita del patrón, en la historia reciente de esta ciudad no ha sido muy afortunada, en los años sesenta se dio licencia para construir un edificio de pisos, de cuatro alturas, pegados a la pared medianera de la ermita con fachada a la calle de San Blas.
En distintas ocasiones, los gobernantes de esta localidad han manifestado la voluntad de derribar este edificio y dejar la ermita exenta para, en un posterior proyecto, dotar la ermita del patrón con una zona ajardinada, de esto hace tanto tiempo que pronto podremos celebrar un nuevo aniversario como el del Arenal.
