La redacción de los proyectos y de la propuesta que el Ayuntamiento de Borriana ha presentado para acceder a los Fondos Feder enfrentó al concejal de Urbanismo y a la oposición con bastante dureza. Se llegó incluso a pedir la dimisión del edil de Urbanismo y se habló de favorecer políticamente a la hora de encargar la redacción del proyecto, el cual ha supuesto para el municipio una aportación de algo más de 19.000 euros.

El ciudadano de a pie entra con facilidad a las denuncias que se suelen hacer con relativa frivolidad, por coincidir empresas con afiliaciones políticas. En estos casos, muchos nos preguntamos si en el ayuntamiento, entre los funcionarios con los que cuenta, no los hay con capacidad para realizar este tipo de proyectos y sus informes técnicos.

Y es que la elección de proyectos a realizar, los suelen decidir los políticos, pero estos estan de paso, «aunque no todos». Sin embargo, los funcionarios acceden tras opositar y en el municipio transcurre prácticamente su vida laboral. Ellos son, por tanto, los conocedores de las necesidades y problemas de los ciudadanos.

Por todo ello, es muy difícil comprender que para realizar unos proyectos que van desde temas urbanísticos hasta sociales, el estudio se tenga que realizar fuera de la casa municipal.

Los vecinos desconocemos si es que no hay buena sintonía entre políticos y funcionarios, o quizás falta de confianza, pero la realidad es que las explicaciones que se suelen dar al respecto no convencen a los ciudadanos.