Castelló recupera poco a poco músculo empresarial azuzado por la mejora de los datos macroeconómicos y se sitúa en cifras de los inicios de la crisis económica. Según una última estadística del Instituto Nacional de la Seguridad Social, la provincia cerró 2015 con 19.034 empresas cotizantes, lo que representa un incremento de 682 (3 %) respecto al mismo periodo del año anterior.
Estas cifras devuelven a Castelló a la situación de 2009 y rompen la tendencia negativa de los años anteriores. La Seguridad Social contempla en empresas cotizantes a aquellas que tienen trabajadores asalariados, desligando de este concepto a los autónomos. En 2007, en plena cresta del crecimiento económico, la provincia superó las 21.000 firmas inscritas en la Seguridad Social. A partir de 2008, la masa empresarial se fue reduciendo de forma paulatina y tocó fondo en 2013 al bajar a las 16.000 mercantiles. De 2008 a 2014 Castelló perdió cerca de 5.000 firmas. El golpe fue especialmente duro en la construcción y en el sector inmobiliario, que habían capitalizado la época de bonanza económica. El fin del «boom» del ladrillo se llevó por delante más de la mitad de las mercantiles de la construcción.
En 2014 se frenó la destrucción empresarial y el pasado ejercicio la provincia encaró un repunte. Todavía se encuentra lejos de las cifras de 2007 pero constata una cierta recuperación económica. Según la estadística de población activa de 2015 (EPA), el desempleó se redujo en 17.100 personas en 2015 mientras la ocupación creció en otras 4.500. Este último dato es importante porque denota una mejora del mercado laboral. Los sindicatos destacan que han disminuido de forma considerable los expedientes de regulación de empleo con extinción de empleo.
El aumento de las ventas un 6% en la cerámica, el crecimiento récord de los tráficos del puerto de Castelló y la subida del número de turistas a la provincia son otros indicadores que plasman las cifras de creación de empresas en Castelló. El secretario general de la Confederación de Empresarios de Castelló, Rafael Montero, añadió que el Producto Interior Bruto ascendió el pasado año un 3,7 % en la Comunitat Valenciana frente al 3,2 % de España y valoró el buen comportamiento de las exportaciones castellonenses.
No obstante, los agentes socioeconómicos advierten que el crecimiento es endeble y que la tasa de desempleo, por encima del 20 %, sigue siendo la principal losa de la economía castellonense. «La economía de Castelló mejora pero la tasa de paro es aún muy alta», según Montero.
Las organizaciones sindicales de Castelló también advierten de que el incremento empresarial es frágil y que las sociedades que se constituyen se caracterizan por su reducido tamaño y por disponer de apenas trabajadores.
Cabe tener en cuenta que en el pasado mes de diciembre se dieron de alta 1.069 empresas en Castelló pero de baja se contabilizaron otras 1.029, lo que pone de manifiesto la debilidad de los nuevos negocios.
