Salva de la Cruz vive su segunda aventura lejos de casa. Fuera de España. Esta temporada en Chipre, tras su primera aventura en Inglaterra. Y las cosas no le están yendo nada mal al guardameta vila-realense. Juega en la Segunda División en Chipre, en el Olympiakos Nicosia, que busca el ascenso a la máxima competición de dicho país. Para ello tendrán que superar a un intratable Karmiotissa que suma 43 puntos, en las 19 primeras jornadas. Los mismos puntos que el equipo de Salva de la Cruz. Quedan siete jornadas para el final y todo es posible. Es ascenso es factible.

Salva de la Cruz no está sólo en tierras chipriotas. Comparte vestuario con dos españoles más. Dos de ellos recientemente militaron en el CD Castellón de Tercera División. El propio arquero y también el lateral zurdo Pablo Suárez (militó en el conjunto albinegro la pasada campaña) y el cordobés Mario Martos, que es el más joven de todos. Los tres hacen piña muy lejos de casa, donde son titulares indiscutibles.

Son catorce los equipos los que participan en la Segunda División de Chipre. Los dos escapados son los que se disputarán el ascenso a la Primera División. El Olympiakos Nicosia ha ganado quince de los diecinueve encuentros jugados. Además, ha empatado uno y perdido tres. Allí, en el club verdiblanco, tres españoles intentan tirar del carro para el ascenso de categoría: el portero Salva de la Cruz (Vila-real, 19 de febrero de 1988), ex del Oxford City; el lateral zurdo Pablo Suárez Barreiro (Vigo, 25 de abril de 1984), ex del Castellón; y el centrocampista Mario Martos Serrano (Córdoba, 14 de noviembre de 1991), ex del Almería B.