El Ayuntamiento de Vila-real ahorrará 180.684 euros en el suministro de luz, gas y en el servicio de control de la legionelosis. Así lo anunció ayer el concejal de Territorio, Emilio Obiol, quien aseguró que «en la línea ya iniciada en la anterior legislatura de reducir costes, al igual que hacen las familias o las empresas, el ayuntamiento va a sacar a concurso en breve los tres contratos».
«El ahorro es un deber, y más para las administraciones públicas», indicó el edil, «ya que ha sido un tema olvidado durante años y, en nuestro caso, no entendemos la función pública sin la preocupación por el gasto y por economizar recursos».
En este sentido, Obiol explicó que el nuevo contrato de la luz se licitará por un importe de 1.223.970,01 euros (sin IVA) y dará servicio a 157 puntos de suministro donde el titular es el consistorio, dos de ellos de alta tensión. La duración del acuerdo será de dos años y el ahorro aproximado respecto al anterior será de un 10%.
Otra licitación es la de 35 contratos de gas natural por un importe total de 132.041,94 euros (sin IVA), también con una periodicidad de dos años y que supondrá economizar un 15% respecto al actual contrato.
El tercero de los concursos será para el servicio de control de la legionelosis, que abarca cuatro lotes: edificios y dependencias municipales (con 38 inmuebles), centros educativos (17 unidades), centros e instalaciones deportivas (10, incluyendo el proyecto de la Bassa d'Insa) y los 42 jardines, 14 fuentes ornamentales y 46 públicas. Cada lote cuesta anualmente 24.051 euros (sin IVA), lo que supone un total de 96.204 euros y el contrato es para cuatro años (2+1+1). En este caso también se prevé una reducción del 10%.
Renegociación en 2015
Esta reserva se suma al ahorro conseguido gracias a la renegociación de contratos que llevó a cabo la Concejalía de Territorio a lo largo del 2015, que solo con la modificación de contratadas en 43 puntos permitió un ahorro de 70.930 euros.
Obiol destacó que «el ahorro es una obligación pública que deberían cumplir todos los ayuntamientos, siempre que no suponga un peor servicio y en este contexto, me gustaría hacer hincapié en la voluntad del Ayuntamiento de Vila-real de no partir o disgregar contratos, en aras del interés general, al contrario de lo que se ha hecho durante mucho tiempo en algunas administraciones públicas». «El objetivo es ahorrar y seguir en la línea de austeridad ya iniciada en un contexto económico y social difícil, donde todas las familias se aprietan el cinturón, y en este caso, todavía con más motivo, porque aunque no hacemos milagros, el dinero es de todos y hay que intentar gestionar como lo haríamos en nuestra propia casa, con responsabilidad», aseguró el concejal responsable del área.
La medida se pondrá en marcha una vez se publique en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) y llegue al resto de diarios oficiales del territorio para «facilitar la pública concurrencia de empresas, ya que el mayor interés no radica en quién ofrecerá el servicio, sino en cuánto costará al bolsillo de los contribuyentes», concluyó Obiol.
