La concejalía de Normalització Lingüística del Ayuntamiento de Vila-real y la Associació Cultural Socarrats se han sumado al Voluntariat pel valencià, que impulsa Escola Valenciana, para fomentar la difusión de la cultura y tradiciones valencianas a través de la lengua. El concejal de Normalització Lingüística, Pasqual Batalla, explicó que se trata de «poner en contacto a una persona valencianoparlante con otra que quiera aprender fluidamente nuestro idioma».

De este modo, se crearán parejas lingüísticas formadas por un voluntario y un aprendiz que deberán estar dispuestos a quedar una hora a la semana, durante 10 semanas para hablar en valenciano. El edil explicó que ya se han inscrito 25 voluntarios y 17 interesados en aprender la lengua de forma oral.

El objetivo final de esta iniciativa es que los tándems se reúnan para conversar de los temas que quieran, cuando quieran y como quieran y, de este modo, acabar con las inseguridades que muchas personas sienten a la hora de comunicarse en valenciano.

No obstante, el conocimiento de la lengua no es la única finalidad de esta campaña. El concejal insistió en que la lengua es importante para la integración, pero también lo es dar acogida a otras personas y darles a conocer las costumbres y tradiciones e insistió que cualquier persona podía ser voluntario, porque no hacía falta ninguna titulación.

Desde la Concejalía de Normalització Lingüística insistió el edil que impulsan todo tipo de cursos de valenciano, entre ellos para los recién llegados, «porque sabemos de la importancia de conocer la lengua del lugar en el que vivimos y sentirnos integrados».

Por su parte, el presidente de Socarrats, Fermín Font, apuntó que «la lengua es el principal valor de nuestra sociedad, porque comunicarse es fundamental». Así, manifestó que «hay personas que no hablan en valenciano por vergüenza o porque les resulta difícil hacerlo con quienes ya se conocen, pero no tanto cuando es con un desconocido y la lengua vehicular es esta». Además, destacó que «para quienes vienen de fuera, hablar en la lengua del país es un aspecto muy importante, porque puede suponerles una barrera o una puerta de entrada vital. Conocerla y practicarla les sube la autoestima, se sienten más integrados y se evita que se concentren núcleos de población en barrios o áreas concretas, fomentando la diversidad, y eso es algo fundamental para todas las ciudades».

«Nadie les va a hacer un examen, ni es preciso hablar el valenciano formal o normalizado, sino de la calle, del día a día», añadió Batalla, al tiempo que animó a participar al máximo número de personas posible para que la iniciativa funcione, al tiempo que anunció que «en breve habría una presentación para dar a conocer la campaña a más vecinos».